Espléndidos recursos naturales para proteger
Tres de los 16 parques nacionales de España se encuentran en Andalucía: Doñana, Sierra Nevada y Sierra de las Nieves, todos ellos clasificados como reservas de la biosfera por la UNESCO. El Parque Nacional de Doñana, con una superficie de más de 104.000 hectáreas, es un antiguo coto de caza formado por playas, dunas y marismas. Es una visita obligada en la región, un paraíso para la flora y la fauna. Es el hogar de millones de aves migratorias, así como de especies en peligro crítico como el águila imperial, el lince ibérico y la tortuga mora. Sierra Nevada es una cordillera apta para el senderismo, pero también para el esquí: en ella se encuentra la estación de Sol y Nieve, una de las más conocidas y mejor equipadas de España. Esta cadena montañosa incluye los dos picos más altos de la península: el Mulhacén (3.479 m) -situado en la Alpujarra- y el Veleta (3.398 m), rodeados por el Parque Nacional de Sierra Nevada, que tiene una superficie de 86.208 ha e incluye 44 pueblos. Por encima de Marbella se encuentra el Parque Nacional de la Sierra de las Nieves. Con una superficie de casi 23.000 hectáreas, alberga numerosas cuevas y galerías aptas para la espeleología, pero también es el hogar del pino azul andaluz, el pinsapo.
La región también cuenta con numerosos parques naturales que incluyen tierra y mar, como el Parque Natural de Cabo de Gata Níjar, reserva de la biosfera desde 1997, que abarca 26.000 hectáreas de tierra y 12.000 de mar. Sus aguas claras son ideales para el buceo. Por desgracia, algunos promotores inmobiliarios corruptos se burlan de la noción de parque natural construyendo sin ningún permiso. La Asociación Amigos del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar se ha constituido para luchar contra esto. En el suroeste de la provincia de Córdoba, el Parque Natural de la Sierra Subbética es un espléndido espacio protegido de 31.560 ha con vegetación de tipo mediterráneo. Los municipios de esta zona están desarrollando un turismo rural bien pensado, que permite disfrutar de cierta calidad de vida. El Parque Natural de la Sierra de Grazalema, con una superficie de 51.600 hectáreas, se extiende por la provincia de Málaga. El emblema de esta zona verde protegida es una rara especie botánica, el pinsapo, un pino relicto de la era terciaria que crece a 1.000 metros de altitud y que ha podido sobrevivir gracias a las fuertes lluvias que caracterizan a esta hermosa región. El Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas alberga 1.200 especies animales. Los botánicos experimentados podrán observar especies tan dispares como la violeta de Cazorla o la grasilla, una planta carnívora
Por encima de la Costa del Sol, desde Marbella hasta Estepona, se encuentra la Sierra Bermeja. Debe su nombre (Bermeja significa rubicundo) al color de sus rocas. La vegetación es muy específica, con especies como el galium viridiflorum o la staelina baetica. Casi el 85% de las especies vegetales que se encuentran en Sierra Bermeja están incluidas en la directiva europea Natura 2000 por su carácter endémico, entre ellas los abetos andaluces, situados en la cima de la montaña y en peligro de extinción. Otros tesoros naturales de Andalucía son el Parque Natural de la Bahía de Cádiz, las marismas de Barbate, Tinto y El Odiel, y la Flecha de Nueva Umbría. También hay que señalar que un gran número de playas de la región han sido galardonadas con la Bandera Azul. La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía tiene una política proactiva para proteger estas zonas, identificar las amenazas medioambientales e informar al público. Pero estos esfuerzos no siempre son suficientes..
Una región especialmente expuesta al cambio climático
Tanto el clima como la ubicación geográfica explican la vulnerabilidad de Andalucía. La provincia de Huelva se vio afectada por graves incendios en 2017. Durante la ola de calor de 2018, las temperaturas podrían alcanzar hasta 48°C en el sur de España. A finales de 2019, las inundaciones causaron varias muertes cerca de la ciudad de Murcia. En la provincia de Almería se encuentra Tabernas, el único desierto del continente europeo. 300 kilómetros cuadrados de tierras áridas protegidas en un parque natural desde 1989, pero que está ganando terreno constantemente debido al calentamiento global. La población española, como en otras partes de Europa, es cada vez más sensible a estas cuestiones. Miles de jóvenes han participado en las caminatas climáticas de los viernes, tras un llamamiento de la activista sueca Greta Thunberg. Pero el tema está luchando por emerger en medio de todos los demás asuntos políticos del país, incluyendo la independencia y el ascenso de la extrema derecha.
Agricultura sobreexplotada
La agricultura representa el 40% del PIB de Andalucía y emplea a más de 120.000 personas. La provincia de Jaén produce aceitunas, mientras que la provincia de Huelva es conocida por sus fresas. El ganado y los cerdos también se crían aquí para producir los famosos jamones "serranos" e "ibéricos". Pero la mayor producción es sin duda la de Almería, donde hay más de 40.000 hectáreas de invernaderos que forman lo que los ecologistas llaman "una isla de plástico". Aquí se producen intensamente frutas y verduras como tomates, pepinos y fresas, para alimentar los puestos europeos, no sin repercusiones en el medio ambiente: la región es regularmente objeto de informes poco halagüeños que denuncian la explotación sobria (sobreexplotación) de los recursos naturales, el uso de fertilizantes químicos y, sobre todo, las condiciones de trabajo de los numerosos trabajadores inmigrantes empleados en estas explotaciones. La gestión del agua, en un contexto de cambio climático, es uno de los problemas ambientales más preocupantes de la región. Y no sólo en Almería. Las capas freáticas se están vaciando debido a esta agricultura y porque algunas granjas utilizan pozos ilegales - hay más de un millón de ellos en todo el país, según Greenpeace España. El Parque de Doñana se ve así amenazado por el cultivo de la fresa, que está secando sus suelos y enfrentándose a un problema de desertificación. Tanto es así que en enero de 2019 la Comisión Europea llevó a España ante el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas por no haber tomado las medidas adecuadas para proteger las masas de agua subterránea de Doñana. Asociaciones medioambientales como FACUA Andalucía (asociación de protección al consumidor), Fundación Savia, Red Andaluza Nueva Cultura del Agua, Ecologistas en Acción, Fundación Nueva Cultura del Agua y WWF se están movilizando en este tema. No es la única amenaza para el Parque de Doñana. En 1998, una presa de la mina de pirita de Aznalcóllar se rompió, vertiendo lodos tóxicos en los alrededores del parque. A pesar de esta catástrofe, en 2015 la administración regional designó al Grupo México para reabrir la mina. El proyecto está actualmente en espera debido a una investigación judicial sobre esta atribución, pero la voluntad sigue estando ahí.
¿Y los alimentos ecológicos?
Sin embargo, los agricultores han comprendido que el futuro es orgánico. Casi la mitad de las granjas convencionales de Andalucía, ya sea de cereales, frutas u hortalizas, se están convirtiendo y la provincia ya alberga la mitad de las tierras de España bajo cultivo orgánico. Los tomates, pepinos o sandías ecológicos de Almería se pueden encontrar a un precio cada vez más bajo en los supermercados europeos. Queda por ver a qué precio... Se acusa a algunas empresas de no respetar las normas sociales y medioambientales. Afortunadamente, las asociaciones y los medios de comunicación están atentos a ellos y no dudan en denunciarlos, pero esta labor de sensibilización lleva tiempo.
Para conocer mejor los problemas de la agricultura en Andalucía y las alternativas que se están desarrollando, la asociación Danyadara de Villamartín ofrece "eco-tours" sobre estos temas. También organiza cursos para aprender la permacultura. También es posible hacer agroturismo en algunas de las granjas orgánicas de Andalucía. Por ejemplo, en la finca Los Portales en Castilblanco de los Arroyos, en la provincia de Sevilla, que también ofrece alojamiento. Aquí puedes ver cómo se hace el queso de cabra, el pan y las verduras orgánicas. Por otra parte, cerca de Ronda, el proyecto LA Organic Experience ofrece la oportunidad de descubrir la producción de aceite de oliva respetuosa con el medio ambiente en una finca de 26 hectáreas decorada con obras de Philippe Starck. También es posible permanecer en el lugar.Alternativas en acción
¿Está relacionado con su clima o su historia política? España es un país propicio para la creatividad, y diferentes comunidades, grandes y pequeñas, están desarrollando estilos de vida alternativos, especialmente desde el punto de vista ecológico. En Andalucía, uno de los mejores ejemplos de esta inventiva es la ecovilla Molinos del Río Agua, en el Parque Natural de Karst en Yesos de Sorbas. El proyecto Sunseed, creado por los ingleses en los años 80, consiste en desarrollar soluciones para combatir la desertificación: uso de la energía solar, filtración de agua, etc. Acoge a los voluntarios durante todo el año. La aldea también tiene una casa autosuficiente, La Casa de La Realidad, una escuela y la producción de permacultura. ¡Inspirador!
Más político, pero también nacido del deseo de hacer la agricultura de manera diferente, en la provincia de Sevilla, el pueblo de Marinaleda y sus 2.700 habitantes han desarrollado un sistema de autogestión. Reunidos en una cooperativa, todos los trabajadores agrícolas reciben el mismo salario y se alojan por 15 euros al mes. Esta comunidad, creada en 1979, atrae a curiosos de todo el mundo. Finalmente, en el espíritu de la "Familia Arco Iris", la comunidad de Beneficio, en las alturas del pueblo de Órgiva, en el Parque Natural de Sierra Nevada, ha estado tratando de desarrollar estilos de vida más verdes, alternativos y solidarios durante veinticinco años, con diversos grados de éxito, pero con cierta creatividad.Algunos jardines notables
Los aficionados a las plantas encontrarán su felicidad en el Jardín Botánico de Córdoba, que alberga un museo etnobotánico y paleobotánico, así como un invernadero dividido en diferentes microclimas. También hay uno majestuoso en Málaga, el Jardín Botánico La Concepción, con 5.000 especies de plantas tropicales, subtropicales e indígenas. Por otra parte, el Jardín Botánico de Cactus, en el Parque Natural de la Sierra de las Nieves, en el pequeño pueblo de Casarabonela, tiene una de las mayores colecciones de cactus de Europa.