Thomas Vinterberg © taniavolobueva - shutterstock.com.jpg

1900-1940, el cine mudo, entre la religión y el erotismo

La primera vampiresa de la historia del cine es danesa: Asta Nielsen, que se convirtió en un icono del cine mudo gracias a una escena de baile considerada muy erótica en Afgrunden (El abismo), en 1910, y que fue censurada en Estados Unidos. Otra estrella del cine mudo danés es Carl Theodor Dreyer, aunque durante mucho tiempo fue ignorado en su propio país y reconocido por primera vez en el extranjero. Tuvo dificultades para encontrar financiación en Dinamarca debido a su pesimismo y a su gusto por lo sobrenatural, lo que disgustaba a los productores. Entre sus obras maestras figuran La pasión de Juana de Arco (1928), rodada en Francia con Renée Jeanne Falconetti, y Ordet (La palabra, 1954).

Películas de género

La mayoría de las películas rodadas entre las décadas de 1930 y 1980 fueron comedias, con la excepción del cine negro de la actriz y directora Bodil Ipsen, codirigidas con Lau Lauritzen Jr. En 1942, Afsporet fue la primera película de este tipo, un drama psicológico sobre una relación erótica entre una mujer casada amnésica y un ladrón. Su película De Røde enge (La tierra será roja), sobre la resistencia danesa, ganó el Gran Premio de Cannes en 1946. Hoy el premio danés de cine lleva el nombre de Bodil Ipsen: el Bodilprisen.

En las décadas de 1960 y 1970 las películas eróticas danesas empezaron a atraer la atención del público de todo el mundo. Dinamarca fue el primer país en legalizar la pornografía, lo que le dio una reputación sensual y vanguardista.

Años 1980: reconocimiento internacional

El cine danés se hizo un hueco en la escena internacional en 1988, cuando El festín de Babette, de Gabriel Axel, ganó un Oscar. La historia se sitúa después de la Comuna de 1871, cuando Babette, una joven francesa, entra al servicio de dos hermanas puritanas, hijas de un pastor, en un pequeño pueblo danés.

Ese mismo año, Bille August recibió la Palma de Oro en Cannes por Pelle el Conquistador, y de nuevo en 1992 por Mejores intenciones. Es uno de los escasos nueve directores que han recibido dos veces este prestigioso galardón.

Aunque ganó dos veces el premio CST al artista técnico en Cannes, en 1984 por Elemento de crimen y después, en 1991, por Europa, Lars von Trier llamó la atención de la crítica tanto por su investigación formal como por la violencia escenificada en sus obras. Tras una miniserie televisiva que mantuvo en vilo a toda Dinamarca, Riget, emitida entre 1994 y 1997, el director convenció totalmente de su talento con Rompiendo las olas (1996): ganó el Robert 1997 (máxima distinción del cine danés), el Gran Premio del Jurado en Cannes y obtuvo un gran éxito en las salas de los países europeos.

Gracias al Robert 1998, que recayó en Barbara, de Nils Malmros, el público pudo descubrir o redescubrir las islas Feroe. Rodada en los barrios antiguos de Hoyvík y Tórshavn, la película es la segunda adaptación de la novela homónima publicada en 1939 por el escritor feroés Jørgen-Frantz Jacobsen. Relata la historia de Beinta Broberg, que se casó sucesivamente con tres pastores feroeses.

Dogma95

Movimiento impulsado en 1995 por varios directores daneses, entre ellos Lars von Trier y Thomas Vinterberg, Dogma95 establece diez mandamientos que rechazan todo artificio (música, iluminación, escenografía, cámara fija, etc.). Considerando que Hollywood, las producciones caras y los efectos especiales habían perjudicado al cine, hicieron voto de castidad imponiendo las cámaras en mano, la luz natural y la música intradiegética (cuya fuente debe contextualizarse dentro de la película), y favoreciendo los experimentos que superan los límites de la interpretación (incluidas las escenas de sexo no simuladas). Entre las películas etiquetadas Dogma95 figuran Festen, de Vinterberg, que ganó el Premio del Jurado en Cannes en 1998, Los idiotas, de Von Trier, Julien Donkey Boy, de Harmony Korine, y Open Hearts, de Susanne Bier.

El nuevo milenio

El cine danés está ahora bien asentado y sigue distinguiéndose gracias a premios y colaboraciones internacionales, así como a la irrupción de nuevas figuras.

Susanne Bier, en sus inicios cineasta de Dogma95, se desmarca del movimiento y adquiere reconocimiento internacional. Fue nominada al Oscar a la Mejor Película Extranjera en 2006 por Después de la boda, pero su coronación llegó en 2011 por Venganza, con un Globo de Oro y un Oscar a la Mejor Película Extranjera.

Entre 1996 y 2005, Nicolas Winding Refn estrenó la trilogía Pusher, que le dio a conocer al gran público y lanzó la carrera de Mads Mikkelsen. Este icónico actor danés alcanzó la fama por su fría y nerviosa interpretación de la némesis de James Bond en Casino Royale, en 2006. En 2012, Mikkelsen ganó el Premio al Mejor Actor por su papel en La caza, de Thomas Vinterberg. En 2020, actor y director volvieron a reunirse para la comedia dramática Borracho, que cuestiona los beneficios y perjuicios del alcohol, una apuesta ganadora, ya que obtuvo el Oscar a la Mejor Película Extranjera.

También está La chica danesa (2016), que, aunque dirigida por el británico Tom Hooper, se basa en la historia de la danesa Lili Elbe, nacida Einar Wegener, que fue la primera persona en someterse a una cirugía de reasignación de género en 1930. La película ganó el Queer Lion en el Festival de Venecia.

Series de televisión

La serie policíaca estadounidense The Killing es una adaptación de la serie danesa Forbrydelsen, creada por Søren Sveistrup. La segunda temporada ganó el premio a la Mejor Producción Europea en el Festival de Televisión de Montecarlo en 2010.

Un autor de series aclamado por la crítica es Adam Price. Entre sus creaciones, Borgen (2012) sigue el ascenso al poder de una mujer en Dinamarca que, aunque ficticia, recuerda la vida de Helle Thorning-Schmidt, ex primera ministra del país. También En el nombre del padre (2017), que retrata a una familia de pastores que lucha contra sus demonios. Actualmente colabora con Michael Dobbs, creador de House of Cards, en una nueva serie sobre política que hay que seguir de cerca.

Para una inmersión total en temas sociales y paisajes feroeses, no se pierda Trom (2022): ecología, contaminación, ballenas... de todo. Más fantásticas: en 2022 Netflix emitió Equinox, una miniserie danesa de Tea Lindeburg, o Las investigaciones de Dan Sommerdahl, de Lolita Bellstar, adaptación de los exitosos thrillers de Anna Grue. En DVD, FLEE (2022) es una película documental de animación que aborda la homosexualidad, tanto en Afganistán como en Dinamarca, la migración y la supervivencia, siguiendo la vida de su héroe, Amin.