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En los bancos de la escuela

Salvo en el caso de las escuelas independientes no subvencionadas a las que asiste una minoría de ontarianos, la educación en el sistema público es gratuita para la escuela primaria y secundaria, generalmente hasta los 17 años. Cabe señalar que la escuela secundaria dura un año más que en Quebec, es decir, seis años. Después de eso, los estudiantes o sus padres deben cubrir los costos, que varían según el programa de estudio y el tipo de escuela. El colegio comunitario o universidad de dos años es el puente entre el instituto y la universidad. Sin embargo, es posible ir directamente a una licenciatura universitaria después de la escuela secundaria, que dura cuatro años en Ontario. El fenómeno de la deserción escolar o del abandono de los estudios no es independiente del hecho de que muchos estudiantes tienen que pagar ellos mismos su educación post-secundaria. Para algunos estudiantes que deben trabajar mientras continúan su educación, el dinero ganado fácilmente en el trabajo puede parecer más gratificante que un título universitario. El costo de la educación universitaria varía según la provincia: en Ontario, el estudiante universitario promedio paga entre 8.000 y 9.000 dólares canadienses en concepto de matrícula por año. Sin embargo, esto es más bajo que en las universidades americanas, pero es el más alto en Canadá. Como resultado, el gobierno provincial aplicó reducciones de las tasas de matrícula en todos los colegios y universidades de Ontario financiados con fondos públicos en su presupuesto de 2019-20.

En el trabajo

La fuerza de trabajo de Ontario está compuesta por más de 12 millones de personas. Sin embargo, con una población envejecida y una baja tasa de natalidad, la provincia se enfrenta a una creciente escasez de mano de obra. Esto se evidencia en una tasa de desempleo que ha sido inferior al 6% en los últimos años y que se encuentra entre las más bajas del país. Aunque Ontario es el campeón de la creación de empleo en el Canadá, hay una demanda desesperada de muchos puestos en la tecnología de la información, la industria, el transporte, los servicios financieros, el turismo, el servicio al cliente, la educación y la atención de la salud, especialmente en las regiones en que el número de vacantes está en aumento. También se fomenta enérgicamente el espíritu empresarial, con el apoyo de incentivos fiscales, subvenciones, apoyo a la puesta en marcha y gestión del crecimiento. La inmigración económica está, pues, en boca de todos, y se están utilizando todos los medios para atraer a posibles candidatos para que se establezcan en Ontario, especialmente a los francófonos, a fin de mantener, e incluso aumentar, la reserva de esta población dentro de las comunidades minoritarias francófonas. Se aconseja a los interesados, sobre todo porque las relaciones laborales tienen buena reputación en la provincia, siendo menos formales y jerárquicas que en Europa. El mercado laboral también es más flexible, las oportunidades de teletrabajo están aumentando y el equilibrio entre el trabajo y la familia y la vida social después del trabajo se están convirtiendo cada vez más en un imperativo.

Uniones y nacimientos

El gobierno canadiense redefinió el concepto de familia durante el último mandato del Primer Ministro Jean Chrétien. En 2000, basándose en la Carta de Derechos y Libertades del Canadá, el Parlamento amplió las obligaciones de las parejas y los beneficios de los que pueden disfrutar a todas las parejas, incluidas las del mismo sexo. En resumen, las parejas de hecho, ya sean del mismo sexo o no, tienen los mismos derechos que los cónyuges casados. Por lo tanto, una gran mayoría de ellos viven en relaciones de derecho común (uniones de hecho) mientras que la institución del matrimonio está en declive.

Esta apertura se confirmó en junio de 2005 cuando el gobierno federal legisló el matrimonio para parejas del mismo sexo con la Ley de Matrimonio Civil. Sin embargo, cuando se aprobó esta legislación, el matrimonio entre personas del mismo sexo ya era legal en Ontario tras la decisión del Tribunal de Apelación de 2003.

Como en todo el país, la tasa de natalidad ha ido disminuyendo desde el máximo histórico del "baby boom" en los años 50. En Ontario, ahora se sitúa en unos 10 niños por cada 1.000 habitantes, un nivel que ha sido bastante estable en los últimos años.

Diversidad sexual

Las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, queer y de dos espíritus (LGBTQ2) están protegidas contra la discriminación y el acoso por motivos de sexo, orientación sexual o identidad o expresión de género. Esos derechos están protegidos por la Carta de Derechos y Libertades del Canadá, la Ley de derechos humanos del Canadá y las leyes específicas de Ontario. El Canadá es también uno de los pocos países del mundo que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo, y lo ha hecho desde 2005.

En Ontario, el pueblo gay de Toronto, en el área de Church & Wellesley, es el más grande de la provincia. Durante el Orgullo Gay de junio, el barrio se llena de celebraciones perpetuas. La capital de Canadá, Ottawa, también tiene su Gay Village, que limita con Nepean Street al norte, James Street al sur, Kent Street al oeste y O'Connor Street al este.

Derechos y libertades

Incluida en la Constitución del Canadá desde la Ley de la Constitución de 1982, la Carta de Derechos y Libertades del Canadá protege la sociedad libre y democrática del país. Considerados esenciales, estos derechos y libertades están protegidos y reconocidos tanto para los ciudadanos canadienses como para los residentes permanentes y los recién llegados: libertad de expresión, derecho de voto, libertad de conciencia y de religión, derecho a la igualdad para todos, derechos de los pueblos aborígenes, derecho de las minorías lingüísticas inglesas y francesas a una educación en su idioma, etc.

Legalización del cannabis

El 17 de octubre de 2018, el Canadá se convirtió en el segundo país del mundo -después del Uruguay en 2013- en legalizar y reglamentar el uso recreativo de la cannabis. Tres años después de su elección, el Primer Ministro Justin Trudeau ha cumplido una de sus promesas electorales más simbólicas. Sin embargo, la aplicación de la ley plantea muchas preguntas y problemas, ya que cada provincia, territorio, ciudad y municipio ha promulgado sus propias normas. Por ejemplo, puedes caminar por las calles de Toronto y fumar tranquilamente tu porro, pero no en Markham. También es importante recordar que, como la mayoría de edad en Ontario es de 19 años, esto también se aplica a la compra y el uso de la cannabis. El cannabis se vende legalmente en línea a través de la Sociedad de Cannabis de Ontario (OCS) y en las tiendas de venta al público con licencia en Ontario. Para más información sobre la legislación y dónde se puede adquirir: ontario.ca/en/page/cannabis.