Música y danza tradicionales
La India es un país de una riqueza cultural sin parangón. Un libro entero no bastaría para ofrecer una visión decente de la dantesca variedad de música y danza tradicionales del norte de la India. Sin ánimo de ser exhaustivos, he aquí una panorámica de las principales prácticas de la región.
- Es imposible no empezar por Rajastán, el estado con mejor reputación para los músicos tradicionales. De hecho, aquí se encuentran castas de músicos nómadas musulmanes profesionales como los Manganyars (alrededor de Barmer) y los Langas (alrededor de Jodhpur). Su música se caracteriza porque sólo tocan ragas asociados a determinadas horas del día o estaciones, y también tienen un repertorio de ragas reservados para todas las ocasiones, como bodas, nacimientos, etc. Como recordatorio, los ragas son un conjunto de reglas védicas que rigen la forma de construir una melodía, típicas de la música india. Otra casta importante en Rajastán es la de los Bhopa (y sus esposas, las Bhopi), sacerdotes-cantores que cantan sobre la vida rural, acompañados de su rawanata (una zanfona de arco).
Similar a formas de poesía lírica como el thumri y el ghazal, el maand es un sofisticado estilo de canción popular, típico de Rajastán y muy propio de la música folclórica de la región. La cantante Allah Jilai Bai fue la gran estrella del maand en las décadas de 1960 y 1970.
Quien no haya visto nunca las danzas del Rajastán no conoce realmente esta región. Empezando por el Kalbelia, una de las formas más sensuales de la coreografía rajastaní. Esta danza mixta, pilar de la identidad de la comunidad del mismo nombre, se reconoce por sus movimientos ondulantes, que aluden al pasado de los Kalbelias como encantadores de serpientes. Además, los músicos que acompañan la danza tocan el pungi, un instrumento de viento de madera utilizado tradicionalmente para capturar serpientes. Las canciones y danzas de los Kalbelia, una joya de la cultura Rajput, fueron inscritas en 2010 en la lista del Patrimonio Inmaterial de la UNESCO.
Conocido por los entusiastas de la danza por haber sido fusionado con la danza occidental contemporánea por el famoso coreógrafo inglés Akram Khan, el kathak es otra de las grandes tradiciones coreográficas de la región. Es una danza con un estatus especial, ya que el kathak ha tenido históricamente una importancia social: al contar la historia de la mitología india, permitió en su día transmitir textos sagrados a un público analfabeto. Reconocible por sus piruetas intercaladas con momentos de inmovilidad, el kathak es una danza muy rítmica que requiere una verdadera habilidad atlética.
El Ghoomar , originalmente reservado a la comunidad Bhil, que lo utilizaba para venerar a la diosa Saraswati, se practica actualmente en todo el Rajastán. Las bailarinas, gráciles y lentas, giran con vestidos vaporosos y acompañan sus giros con gestos expresivos de las manos. El Ghoomar suele representarse en celebraciones como bodas o actos religiosos, y a veces puede durar mucho tiempo.
La última gran tradición rajastaní, el Dandiya (o Dandiya Raas) es una danza mixta de palos, con hombres y mujeres enfrentados en dos filas y cada bailarín moviéndose al compás para golpear el palo de su pareja.
Muy popular y especialmente apreciada por los turistas, la famosa Feria de Pushkar es una de las mejores maneras de entrar en contacto con las tradiciones rajputas. En el programa: danzas, música, marionetas, parque de atracciones y circo..
- El dandiya también se practica en Gujarat, pero la región es más conocida por una danza relacionada: el garba. Se baila en torno a una lámpara encendida o una imagen de la diosa Shakti, en círculos concéntricos de bailarines muy coloridos, sincronizados con los mismos pasos, y el ritmo va in crescendo. La danza suele tener lugar durante Navarātrī, un gran festival hindú que dura nueve noches y diez días y celebra diversas formas de la deidad Shakti.
-Odisha alberga una de las danzas clásicas más emblemáticas de la India: elOdissi. Esta dramática coreografía cuenta una historia extraída de textos hindúes, obedeciendo a los principios de Nritta y Nritya. El primero trata de la disposición estética de los movimientos corporales, de la forma en que crean belleza. El segundo trata de la forma en que las expresiones faciales y los gestos de las manos pueden transmitir emociones y contar una historia.El Odissi concede gran importancia al ritmo (con el zapateado), la expresividad y el simbolismo mediante el uso de mudras (posiciones codificadas y simbólicas de las manos)
- Manipur, un pequeño estado de 22.000 km2, es conocido sobre todo por sus danzas folclóricas. Aquí se practica el magnífico Manipuri, una de las ocho formas de danza clásica india. Interpretada por mujeres ataviadas con faldas y tocados cónicos, representa el amor divino entre Krishna y Radha, con bailarinas que interpretan todos los papeles, incluidos Krishna, las pastoras y Radha, la favorita de Krishna. En general, de esta danza emana una tranquila armonía, con su ritmo lento, movimientos suaves, expresiones faciales pacíficas y movimientos circulares y ondulantes. Todavía se practica como danza espiritual, y se interpreta principalmente delante de los templos durante los festivales religiosos.
- Poco conocido en el extranjero, Manipur es también el estado del que procede esta joya, la Sankirtana. Estos bellos poemas cantados suelen ser interpretados por dos tamborileros y una docena de cantantes-bailarines, y tratan de la vida y los logros de Krishna. Las voces y los ritmos se aceleran hasta alcanzar un crescendo, la interpretación es intensa y el público puede emocionarse hasta las lágrimas.
- En el vasto estado deAssam hay muchas prácticas tradicionales, una de las cuales es emblemática: el sattriya. También una de las principales danzas clásicas de la India, toma su nombre de los sattras, los monasterios donde desde hace mucho tiempo tienen lugar las representaciones. Aquí los temas están vinculados a Krishna y a historias extraídas de epopeyas como el Mahābhārata y el Rāmāyana, todo ello contado a través del cuerpo, los gestos y las expresiones faciales. La danza se acompaña de composiciones musicales llamadas borgeet, una serie de canciones líricas ambientadas en ragas específicos. Estas canciones fueron compuestas por Srimanta Sankardeva (y Madhavdeva) en los siglos XV y XVI, un santo, poeta y reformador hindú asamés cuya figura es muy importante en la región.
Assam es también la cuna de la danza Bihu, un baile muy alegre con pasos vivos y rápidos movimientos de manos, que se interpreta durante los tres festivales Bihu, asociados a la agricultura, la cosecha y el arroz en particular.
Assam es también la cuna del Tokari Geet, una canción folclórica asamesa que se canta mientras se toca el tokari (un tipo de guitarra de una sola cuerda), del Kamrupi Lokgeet, música folclórica en dialectos kamrupi, y del Goalparia Lokogeet, que se canta en goalpariya.
- El Chhau, originario de Odisha y muy practicado en Bengala Occidental, es una danza india semiclásica a medio camino entre la coreografía y el arte marcial. También se inspira en episodios del Mahābhārata y el Rāmāyana, pero destaca por sus movimientos de combate simulado e imitaciones de animales. Exclusivamente masculino, suele representarse de noche, al aire libre, al son de instrumentos de viento como el mahuri y el shehnai. En 2010 se incluyó en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Bengala Occidental es la cuna del kirtan, una forma muy apreciada de canto devocional, interpretado en grupos en un estilo de llamada y respuesta. Generalmente, un cantante lanza un canto o mantra al que un grupo de cantantes responde a coro.
Estos cantos en sánscrito pueden durar varias horas y tienen una profunda dimensión espiritual. Suelen ir acompañados de instrumentos típicos del país, como el vinā, la tabla (tambor de un solo lado) o el mridangam. El vinā es uno de los instrumentos más populares de la música clásica (y tradicional) india. Esta cítara tiene un mástil de madera de 1,50 metros de largo, con resonadores en cada extremo. El intérprete se sienta con las piernas cruzadas para tocarla. Existe una versión sin trastes, la chitravinā, que es más imponente y se toca con los resonadores en el suelo. El mridangam se utiliza para el acompañamiento rítmico. Es un tambor horizontal con dos lados, cada uno formado por tres círculos concéntricos de piel.
En esta región también se canta Bhatiyali, una forma de música folclórica cantada originalmente por los barqueros, que utiliza muchas metáforas para describir el estado del agua y la situación de barqueros y pescadores. El género tuvo su apogeo entre los años 30 y 50, cuando algunos de los grandes nombres de la canción contribuyeron al Bhatiyali.
- En el Punjab, la tradición musical emblemática es el Bhangra, una forma de música folclórica basada en la danza y fuertemente influida por la energía del dhol (un tambor con un sonido característico). El término bhangra también hace referencia a la danza que acompaña a esta música, cuya versión puramente femenina se denomina giddha. Singular y emblemático, el bhangra es un pilar de la cultura punjabí, incluso dentro de su diáspora.
- En el estado de Chhattisgarh, la canción folclórica pandavani extrae sus historias de la antigua epopeya india, el Mahābhārata. Un narrador-cantante encarna a todos los personajes, sin atrezzo ni escenografía, pero a veces apoyado por un grupo de intérpretes al armonio, la tabla o el dholak.
No olvidemos mencionar una tradición presente en todo el norte, si no en todo el país: el Ramlila, una escenificación de la epopeya Rāmāyana en forma de cuadros que combinan canto, narración, recitación y diálogo. Se representa durante el Dussehra, que se celebra cada año en otoño. El Ramlila evoca la batalla entre él y Rāvana, símbolo de la victoria del bien sobre el mal, en la que se invita al público a cantar y participar en la narración. Como muchas tradiciones indias, el Ramlila figura en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.
El Festival de Danza y Música de Konark es una excelente manera de conocer todas estas tradiciones al mismo tiempo y en el mismo lugar. Desde 1986, este festival ofrece actuaciones de algunos de los mejores artistas del país, comoOdissi, Kathak, Bharatnatyam, Kuchipudi, Manipuri, Mohiniattam..
Música clásica
A grandes rasgos, la música clásica india se divide en dos grandes tradiciones: la del Norte, conocida como "música indostaní", y la del Sur, conocida como música carnática. Aunque son gemelas idénticas (y durante mucho tiempo fueron la misma), pues ambas obedecen al marco melódico del raga, estas estéticas difieren en varios aspectos esenciales. En la música indostaní, por ejemplo, se fomenta la improvisación, mientras que la música carnática exige una estricta adhesión a la composición. Naturalmente, hay influencias muy diferentes entre el Norte y el Sur, y el impacto secular de las cortes mogoles y los artistas de Irán se deja sentir en la música indostaní.
Otra especificidad de la música del Norte reside en los tres grandes tipos de canción que admite: dhrupad, khyal y tarana. El primero es esencialmente devocional, antaño muy común, pero poco a poco ha dado paso al khyal, un estilo de canto menos austero y más libre. La tercera forma es la tarana, utilizada para transmitir un sentimiento de exaltación, generalmente al final de un concierto.
La orquesta suele estar formada por un solista -de sitar, sarod (primo lejano del rabab afgano), sarangi, etc.-, un intérprete de tabla y un acompañante de tampura, un tipo de laúd punteado que no se utiliza para producir la melodía, sino para apoyarla con un bordón.
Como se puede adivinar, la galería de músicos indostaníes es inmensa. El más famoso, al menos para los oídos occidentales, es el célebre Ravi Shankar (1920-2012). Este virtuoso del sitar, gran maestro de la música india, se ha convertido en el emblema de la música india en todo el mundo. Su fama mundial se debe en gran parte a sus colaboraciones con el violinista Yehudi Menuhin y el guitarrista de los Beatles George Harrison. Todos sus discos son auténticas joyas, y muchos de ellos tratan maravillosamente de la música indostaní.
Otros nombres importantes son Ali Akbar Khan (1922-2009), virtuoso del sarod que enseñó música en California. Abdul Rashid Khan, conocido como "Rasan Piya", fue uno de los grandes cantantes de música indostánica (famoso por su khyal), y Hariprasad Chaurasia, un gran flautista que popularizó enormemente la música indostánica.
El Harballabh Sangeet Sammelan, fundado en 1875, es el festival de música indostánica más antiguo del mundo y se celebra todos los años en Jallandhar.
Música popular
Una de las formas de música más apreciadas en la India es el "filmi", o canciones de Bollywood. Este género representa la inmensa mayoría de las ventas de música en la India, y muchos de sus artistas son estrellas. Hablamos de los artistas que firman las bandas sonoras -a menudo grandes nombres de la música clásica, como Ravi Shankar o Ali Akbar Khan, por ejemplo-, pero también de los "playback singers". En las películas indias, los actores rara vez cantan, así que músicos profesionales se encargan del playback. Se trata de una profesión en sí misma, en la que han destacado y siguen destacando algunos artistas del Norte, como Geeta Dutt (1930-1972), considerada una de las mejores cantantes de playback de todos los tiempos; Mohammed Rafi (1924-1980), que fue uno de los cantantes más grandes e influyentes del país, famoso por su capacidad para adaptar su voz a la personalidad y el estilo del actor en pantalla; Kishore Kumar (1929-1987) una leyenda, capaz de cantar en varias voces y más recientemente Shreya Ghoshal, una de las cantantes más prolíficas de la India o Alka Yagnik, reconocida por Guinness World Records como la artista más vista del mundo en 2022 con 15.300 millones de visitas en YouTube.
