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Salud pública

Gracias a la gran prudencia de los ecuatorianos y a su respeto por la normativa sanitaria, el país fue uno de los primeros en reabrir sus puertas al turismo en 2021 y ya está prácticamente fuera de este complicado episodio. La reestructuración del sistema sanitario está en marcha y llevará tiempo, sobre todo porque la dimisión de Guillermo Lasso en mayo de 2023 paralizó prácticamente el país desde el punto de vista legislativo. El servicio hospitalario público está muy falto de recursos y las clínicas privadas son inaccesibles para la gran mayoría de la población. Pero está claro que la incertidumbre política no favorece una política sanitaria a largo plazo, sobre todo teniendo en cuenta que el mandato actual sólo durará 18 meses.

Economía

La economía es sin duda otro de los grandes retos de Daniel Noboa y de su próximo sucesor, dada la enorme deuda nacional y la falta de liquidez de Ecuador. La difícil situación económica que Moreno dijo heredar en 2017 se ha agravado desde 2019 por la falta de liquidez, y colapsó en 2020 con una caída del 7,8% del PIB debido a la pandemia, lo que provocó la pérdida de empleos y el aumento de la pobreza. Desde entonces, sin embargo, se ha iniciado la recuperación, aunque de forma desigual, dejando atrás, como suele ocurrir, a los más afectados por la crisis, especialmente los indígenas de las regiones de la Sierra y la Amazonía. Esto representa un gran riesgo para el gobierno, porque en Ecuador los indígenas siempre están dispuestos a paralizar el país si se sienten abandonados, como ha ocurrido a menudo en el pasado. Dado que el petróleo sigue siendo el principal recurso del país, la transición energética será también una empresa de gran envergadura, y el desarrollo de otras fuentes de ingresos para el país será esencial. Afortunadamente, el país es un gran exportador de fruta y gambas, sectores con un futuro brillante y creciente.

La migración y su multidimensionalidad

A pesar de la creciente inseguridad, el clima económico relativamente favorable está contribuyendo a invertir el flujo migratorio: muchos emigrantes regresan a su país. Los sucesivos presidentes, desde Rafaël Correa a Guillermo Lasso, han animado a sus nacionales a volver a casa (la mayoría de ellos están en España) y contribuir así al desarrollo del país. Se calcula que alrededor del 70% de los 400.000 ecuatorianos que estaban en España antes de 2018 expresaron su deseo de regresar, en lo que ha tenido mucho que ver la crisis económica en Europa. Varios gobiernos recientes han tratado de atraer a trabajadores cualificados, en particular ingenieros y científicos, con el objetivo de desarrollar la investigación. Pero al mismo tiempo, la migración de más de seis millones de venezolanos a la subregión andina como consecuencia de la grave crisis económica de la vecina Venezuela está poniendo en dificultades a toda la región. Es la mayor crisis humanitaria que ha vivido América Latina. Millones de personas se lanzan a las carreteras en busca de una vida mejor para ellos y sus hijos, pero esto no facilita las cosas a los gobiernos locales, que ya están luchando por frenar el desempleo entre sus ciudadanos. Las tensiones entre los ecuatorianos y los emigrantes de Venezuela son a menudo palpables, a pesar de que muchos venezolanos se están integrando rápidamente en la sociedad ecuatoriana, al igual que miles de ecuatorianos lo hicieron en Venezuela en el pasado.

Extracción ilegal

Con los enormes recursos naturales de Ecuador (oro, plata, plomo, zinc, cobre y piedras preciosas, por no hablar del petróleo), el apetito de los buscadores es grande y abundan las minas ilegales. Por desgracia, la minería, como la búsqueda de oro en los ríos, tiene consecuencias catastróficas para el medio ambiente. El nuevo gobierno dejó claro nada más tomar posesión que esta cuestión sería prioritaria para él. Al mismo tiempo, la extracción oficial de petróleo es un verdadero desafío económico y social. Los mayores yacimientos petrolíferos de Ecuador se encuentran en zonas del país donde la naturaleza es más frágil, como el Parque nacional Yasuní. Cientos de ríos están ahora gravemente contaminados y la tasa de deforestación no ha dejado de aumentar desde las últimas elecciones. Afortunadamente, el pueblo ecuatoriano votó en referéndum en agosto de 2023 contra la explotación del subsuelo del Yasuní, que por fin parece protegido de esta gangrena. Esperemos que dure.

La transición ecológica

En junio de 2021, Guillermo Lasso dio el pistoletazo de salida a la carrera de la transición ecológica asignándole parte de un ministerio. El Ministerio de Medio Ambiente y Agua se ha convertido también en el Ministerio de la Transición Ecológica, un tema esencial para la preservación del planeta. Aunque sutil, este cambio demuestra el interés de las nuevas instituciones por este tema. La voluntad política en este sentido no es nueva, pues la Constitución de 2008 ya incorporó el concepto de Sumak Kawsay, el buen vivir, que implica la protección de la madre tierra, pero en la práctica los avances han sido demasiado lentos. Un estudio del INEC de 2018 muestra que solo 1/4 de las empresas ecuatorianas operan con permiso ambiental, y apenas el 0,7% de los empleados de las empresas estudiadas se dedican a tareas de protección del medio ambiente. Una vez aprobada la legislación, el Estado debe ahora incentivar al sector privado y obligar al sector público a actuar. El nuevo presidente, Daniel Noboa, se ha comprometido a ello desde su elección en octubre de 2023, pero sólo tendrá 18 meses para poner en marcha unas estructuras que probablemente vuelvan a trastocarse en 2025, tras las próximas elecciones.

En cuanto a la protección de la naturaleza, esencial en todo proceso de transición ecológica inteligente, Ecuador, que goza de una biodiversidad excepcional, y a pesar de la inclusión en su Constitución del concepto de interés público en la protección de la naturaleza y la biodiversidad, es sancionado o señalado regularmente por las instituciones internacionales competentes. Las sanciones previstas por la ley son probablemente demasiado débiles para tener algún impacto sobre los traficantes de animales, por ejemplo, que siguen siendo numerosos en el país, como lo demuestran las incautaciones regulares realizadas en las fronteras.