Clima Uruguay
Uruguay tiene un clima subtropical oceánico húmedo, con temperaturas moderadas y precipitaciones regulares durante todo el año. El país está en el hemisferio sur, por lo que las estaciones son inversas a las del hemisferio norte. El verano, de diciembre a marzo, suele ser caluroso y húmedo. Sus temperaturas oscilan entre los 22 y los 30°C. Es entonces cuando comienza la temporada alta y la costa se ve invadida por veraneantes brasileños y argentinos que vienen a disfrutar de las paradisíacas playas y de la seguridad de la zona. También es el momento en que los precios del alojamiento, las comidas y las actividades se disparan, llegando a triplicarse en ocasiones. Por ello, es imprescindible reservar con antelación.
Estaciones y condiciones meteorológicas
Aunque bastante cálido debido al aporte constante de humedad tropical de los vientos alisios, el clima de Uruguay varía significativamente con las estaciones. De hecho, las variaciones estacionales son bastante pronunciadas, pero las temperaturas extremas son poco frecuentes. Su clima subtropical húmedo es comparable al del sudeste de Estados Unidos, y su clima oceánico es similar al del norte de Francia. El verano comienza en diciembre y termina en marzo. Las temperaturas medias oscilan entre 22 y 28°C. Alrededor de Nochevieja, las temperaturas pueden alcanzar los 38°C. Durante este periodo, tenga cuidado y protéjase adecuadamente si permanece al sol más de 15 minutos. El verano también es una buena época para visitar las zonas costeras, ya que muchos centros turísticos cierran en otoño. Es una buena época para visitar las ciudades, constantemente animadas con eventos culturales, especialmente Montevideo, que tiene una vibrante vida nocturna y musical durante este periodo. El otoño comienza en febrero y termina en marzo. Es la mejor época para visitar el país, mucho más tranquilo. Los veranos indios son frecuentes, por lo que las aguas están más templadas tras calentarse todo el verano. Luego llega el invierno, que empieza en junio y termina en septiembre, con temperaturas medias que oscilan entre los 10 y los 16°C. Ningún turista viene a Uruguay durante este periodo frío y lluvioso. Aunque rara vez ocurre, a veces las temperaturas descienden por debajo de cero durante la noche. La insolación media sigue siendo bastante agradable, de 7 a 8 horas diarias, aunque puede desanimar a los amantes del sol y la playa. Por último, la primavera (de septiembre a noviembre) ofrece un clima suave y es ideal para visitar la floreciente y soleada campiña. Sin embargo, el tiempo puede ser un poco frío para nadar. Por último, como podría sugerir la abundancia de agua en todo el país, la humedad y la niebla son habituales.
Fenómenos meteorológicos
El país está expuesto a diversos tipos de fenómenos meteorológicos, como inundaciones, sequías, ciclones y tornados. Sus costas están situadas en medio de dos grandes corrientes que luchan por imponerse la una sobre la otra. La corriente fría de las Malvinas choca con la corriente cálida de Brasil, lo que da lugar a un clima muy variable. Además, al no haber cadenas montañosas, las masas de aire ecuatorial y polar tienen libre acceso al país, lo que a menudo da lugar a veranos muy calurosos e inviernos muy frescos para su latitud. El país experimentó temperaturas récord durante dos olas de calor consecutivas a finales de noviembre y principios de diciembre de 2022. El termómetro marcó 42,7°C. El fenómeno más frecuente y significativo son las inundaciones, normalmente causadas por el desbordamiento de ríos y arroyos, lagos y embalses como consecuencia de fenómenos meteorológicos que generan precipitaciones persistentes(temporales). Las precipitaciones se distribuyen de forma bastante uniforme a lo largo del año, con precipitaciones anuales que oscilan entre 1.000 y 1.500 mm. Las precipitaciones intensas pueden provocar subidas muy rápidas del nivel del agua (de unos minutos a unas horas) y corrimientos de tierra. Además, Uruguay está situado en su totalidad dentro del eje central del corredor sudamericano de tornados, que es la segunda zona de mayor incidencia de tornados del mundo después del suroeste de Estados Unidos. Los vientos, generalmente fuertes, son una característica del clima uruguayo. Pueden ser repentinos y muy pronunciados. Los vientos predominantes son los del norte, secos y cálidos, mientras que los de la pampa y el sur son fríos y húmedos. No obstante, los vientos procedentes del océano contribuyen a moderar las temperaturas, a menudo muy elevadas en verano. El pampero es un fuerte viento del suroeste que sopla en la pampa en cualquier época del año, pero es más frecuente en invierno. Produce una humedad penetrante, un descenso considerable de la temperatura y fuertes lluvias con ráfagas que pueden durar hasta 3 días. Este fenómeno meteorológico también afecta al nivel del agua del Río de la Plata. Por último, los ciclones tienden a desarrollarse sobre Uruguay, desplazarse hacia el sudeste e intensificarse sobre el océano Atlántico.
Cambio climático
En los últimos años, el clima ha entrado en la agenda política uruguaya como nunca antes. Los indicadores del cambio climático apuntan a escenarios catastróficos en los que la frecuencia de las catástrofes naturales aumentaría drásticamente si no se toman medidas. Y aunque el país es reconocido como líder en Sudamérica en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, sigue siendo vulnerable a las actividades industriales de los países vecinos. Con cerca del 93% de la población viviendo en zonas urbanas, el 70% de ellas en zonas costeras, existe una clara preocupación por la subida del nivel del mar. En la actualidad, el país tiene casi 12.000 hectáreas en riesgo por la subida del nivel medio del mar y 28.000 km2 de pérdidas por erosión. Esto afecta no sólo a la producción agrícola, que es el principal sector productivo y económico del país, sino también al sector turístico. Por estas razones, Uruguay ha adoptado numerosas acciones voluntarias de mitigación y resiliencia ante el cambio climático, especialmente en el sector energético (el país produce actualmente más del 98% de su electricidad a partir de fuentes renovables). En 2015, el país se convirtió en signatario del Acuerdo de París y, del mismo modo, en 2021, el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, acompañado por el ministro de Medio Ambiente, Adrián Peña, y los ministros de Economía, Industria y Ganadería, presentaron una estrategia climática a largo plazo destinada a alcanzar el ambicioso objetivo de la neutralidad deCO2 para 2050.
