Famille cubaine © Julio Rivalta - iStockphoto.com.jpg

Demografía y lugar de la mujer en la sociedad cubana

Elcrecimiento de la población cubana fue ligeramente inferior en 2022, con una tasa del -0,21%. Esto se explica, por una parte, por el envejecimiento de la población, el paso del covid-19 en las filas cubanas; por otra parte, por el descenso de la fecundidad (tasa de fecundidad en 2022: 1,71), que no permite la renovación de las generaciones. En 2022, la tasa de natalidad era del 10,11 ‰ cuando la tasa de mortalidad era del 9,29 ‰. Esta dinámica demográfica se acerca a las tendencias que se observan en los países desarrollados. De hecho, Cuba presume de tener una tasa de mortalidad infantil inferior (4,13 ‰) a la de Estados Unidos (5,17 ‰). En una inversión muy reciente de esta tendencia, la esperanza de vida es mayor en Estados Unidos que en Cuba: el cubano medio vive hasta los 79,6 años, frente a los 80,59 de Estados Unidos. La edad media de la población cubana es de 42,1 años (2022).

Aunque la composición étnica de Cuba es bastante variada -51% de mestizos, 37% de blancos, 11% de negros, 1% de asiáticos- la tasa de alfabetización del país es ejemplar: ¡100%! ¿Quién puede superar eso? Los continuos esfuerzos del régimen en materia de educación desde los años 60 han dado sus frutos, convirtiendo a Cuba en un modelo mundial del sistema educativo. En 2019, el ranking mundial por índice de desarrollo humano, que publica cada año la ONU, situó a Cuba en el puesto 70 de 189 países, con un IDH de 0,783. También cabe destacar la importancia del lugar que ocupa la mujer en la sociedad cubana.

Aunque no existe una ley que regule la paridad de género en la representación política, gracias a la revolución, Cuba ha conseguido subir al podio mundial: en 2013, la isla tenía el tercer porcentaje más alto de mujeres diputadas. Desde 2018, incluso son mayoría: la cuota femenina en el parlamento cubano es del 53,22%, lo que convierte a Cuba en el segundo país del mundo, después de Ruanda, en participación política femenina. Las mujeres también representan el 40% de la población activa, casi el 70% de los licenciados en ciencias, el 33% de los licenciados en ciencias y tecnología y el 63% de los licenciados en educación. Aunque las mujeres cubanas están unidas en la Federación de Mujeres Cubanas(FMC), el machismo sigue teniendo un fuerte arraigo en la sociedad cubana. Además, a pesar de una población mixta muy numerosa y de un marco legislativo que garantiza la igualdad para todos, el racismo sigue estando presente. Así, un hombre negro en una relación con una mujer blanca, o viceversa, tiende a ser mal percibido dentro de la sociedad cubana.

Historia de la migración en Cuba

A la llegada de Cristóbal Colón y los conquistadores, la población indígena de Cuba se estimaba en unos 100.000 individuos. A continuación, se agruparon en tres grupos: los siboney, los taínos y los caribes. Rápidamente explotadas y obligadas a trabajar por los españoles, estas poblaciones fueron muy rápidamente diezmadas. Las masacres de los que no querían someterse, los malos tratos y las enfermedades importadas por los hombres del Viejo Mundo acabaron con los nativos. A finales del siglo XVI, los habitantes originales de Cuba habían desaparecido casi por completo de la superficie de la isla.

Para hacer frente a esta escasez de mano de obra, los colonos recurrieron a la esclavitud y participaron activamente en el comercio triangular. A partir del siglo XVII, un gran número de africanos, principalmente de la costa occidental de África, vinieron a poblar los campos de la campiña cubana. En cuanto a la población blanca, eran principalmente españoles de las regiones pobres del país, es decir, Galicia, Extremadura, Andalucía, Asturias y Canarias.

Por último, la parte asiática de la población de Cuba se explica por la llegada masiva de chinos en el siglo XIX, tras la abolición de la esclavitud. La isla necesitaba trabajadores, especialmente para la construcción del ferrocarril. Fue en La Habana, en el Barrio Chino (más simbólico que realmente poblado por chinos en la actualidad) donde se concentró esta población recién llegada

Cabe señalar que desde la revolución de Fidel Castro en 1959, más de un millón de cubanos han emigrado, principalmente a Estados Unidos.

Idiomas cubanos

En Cuba, el español es la lengua oficial. A diferencia de otras islas de la región del Caribe, donde los dialectos suelen ser bastante numerosos, en Cuba el 90% de la población sólo habla español -mezclado con aportaciones africanas o amerindias, como en el resto de América Latina-, lo que confiere al país una bonita homogeneidad lingüística. Sin embargo, aunque domines la lengua de Cervantes a la perfección, los cubanos te harán pasar un mal rato, al menos durante los primeros días. Tienen tendencia a hablar deprisa, comiendo muchas sílabas y olvidándose casi sistemáticamente de pronunciar la "s". No te asustes, tu español se aclimatará muy rápidamente y también te encontrarás masticando palabras. Además de un acento muy particular, la versión cubana del español ha desarrollado una jerga muy local. Desde La Habana hasta Santiago, oirás Que bola? (¿Qué tal? ¿Cómo te va?), a menudo acompañado de la palabra Acere o Asere, una forma típicamente cubana de decir "mi amigo". La palabra guajiro (guajira en femenino) se refiere a los campesinos y otros trabajadores de la tierra, mientras que Yuma se utiliza para nombrar a los extranjeros, en una especie de versión cubana del gringo mexicano, salvo que no se refiere sólo a los norteamericanos sino a todos los extranjeros. Por lo demás, si eres hispanohablante, déjate sorprender por las deliciosas expresiones que se cruzan en tu camino

En cuanto alos otros idiomas que se hablan en la isla, el chino ocupa el primer lugar, ya que la diáspora china es importante, sobre todo en La Habana. Más raramente, el portugués y algunas lenguas criollas de las islas vecinas pueden oírse aquí y allá. Entre las especificidades cubanas, cabe destacar la existencia de un "lenguaje secreto". Se trata del lucumí, una lengua de origen nigerino-congoleño conocida familiarmente como yoruba en Cuba. Se utiliza con fines muy específicos, en el marco de ritos sagrados vinculados a la santería, un sincretismo religioso nacido en Cuba, cercano al candomblé brasileño y al vudú haitiano. Esta lengua es mucho más una lengua ritual que una lengua común, como el latín en la religión católica.