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Festivales

El Suroeste es tierra de festivales Los aficionados al jazz no querrán perderse una escapada a la Gironda y las Landas. Cada mes de julio, el Festival de Jazz de Andernos acoge tres días de música en la bonita localidad costera de Andernos-les-Bains. Desde su creación en 1968, conciertos internacionales de jazz y desfiles callejeros animan las calles de la localidad en pleno verano. Todas las plazas y el muelle están invadidos por la música. El mismo ambiente reina en las Landas con Jazz en Sanguinet. Durante cuatro días, esta localidad de las Landas se transforma en un pueblo de jazz. Los conciertos tienen lugar en el Espace Gemme, un caserío típico de las Landas lleno de encanto. En el País Vasco, la música clásica es la protagonista del Festival de Piano de Biarritz. Desde hace diez años, este acontecimiento cultural se ha consolidado como uno de los más importantes de la región. Esta sublime ciudad costera acoge también en septiembre un magnífico festival de danza: Le temps d'aimer la danse. La ciudad, famosa por su centro coreográfico, el Ballet Malandain de Biarritz, acoge cada año a compañías francesas e internacionales que convierten las calles en escenarios abiertos a los transeúntes. Durante el día, los bailarines ensayan sus coreografías y ofrecen espectáculos eclécticos y gratuitos. Una cita ineludible Auténtica fuente de inspiración, este festival creado por el presidente de Cultura de Biarritz con la participación del municipio combina exposiciones, talleres, proyecciones de películas y, por supuesto, espectáculos espectaculares. En Burdeos, la música es la protagonista, con el festival Climax en Darwin, el Festival des Hauts de Garonne en el Rocher de Palmer, que presenta músicas del mundo, y el ineludible festival Relâche, que se celebra cada verano en la ciudad. Otro festival multidisciplinar es el Festival Internacional de las Artes de Burdeos Métropole (FAB). Su programación, siempre sorprendente, incluye teatro, danza, performance, circo, música y artes plásticas.

Música y canciones tradicionales

La canción, la danza y los instrumentos musicales forman parte del patrimonio de la región. Las canciones tradicionales vascas, cuyos orígenes se remontan a la Edad Media, figuran entre las más emblemáticas de Francia, al igual que el bertso, típica canción improvisada. A veces se acompañan de instrumentos como el trikiti (o trikitixa), un acordeón diatónico. En Gascuña, la gaita de las Landas, conocida como boha, es uno de los instrumentos más representativos de la región, que se toca principalmente en el bosque de las Landas. Este instrumento de viento es una especie de clarinete doble y puede tocarse polifónicamente. La boha era muy popular en el siglo XIX, tocada por uno o dos músicos (el bohaire) en las fiestas locales. Desde los años 70 se ha recuperado. Junto a ella están el violín, tradicionalmente tocado en la región de Béarn pero introducido en las Landas en el siglo XIX, la pandereta (también tocada en el País Vasco con el nombre de soïna), la flauta, la chalemina y el clari. Si desea más información sobre los cantos e instrumentos musicales tradicionales de la región, la Federación de Asociaciones de Danzas y Músicas Tradicionales de Gironda recoge todas las prácticas en su página web. Desde su creación en 1994, trabaja para que estas artes sean reconocidas y promovidas lo más ampliamente posible. También encontrará una agenda completa de los próximos eventos que le ayudarán a preparar su visita a la costa de Aquitania.

La banda de música

¿Cómo hablar de música sin mencionar la banda? La banda es una especie de banda de música originaria de las ciudades de Dax y Bayona. Es un término asociado a las fiestas Es durante las ferias cuando las bandas recorren libremente las calles de las Landas y de las ciudades vascas. Instrumentos de metal, madera y percusión tocan música tradicional durante estas fiestas. Una tradición en toda la región de Gascuña. El paquito también se toca al ritmo de la banda. En parte baile, en parte juego deportivo, esta costumbre del suroeste procede de las ferias. ¿Conoce el principio? Varias personas sentadas una detrás de otra en el suelo llevan a pulso a uno de los participantes tumbado encima de ellas. Durante estas fiestas, se puede escuchar la música de Paquito el Chocolatero, un clásico interpretado por las bandas del Suroeste. Este pasodoble, compuesto en 1937, se ha convertido en una banda sonora imprescindible.

Las danzas de Gascuña

La costa de Aquitania es tierra de tradiciones. La pertenencia a una misma cultura se expresa a través de la danza. Las danzas tradicionales forman parte del patrimonio local. El congò es uno de estos bailes, presente en gran parte de Gascuña, sobre todo en el departamento de las Landas, en las zonas de Grande-Lande y Marsan. Inspirada en las contredanses inglesas, esta danza campestre se basa en un movimiento muy codificado de bailarines, dispuestos en círculo o en cuadrado. El congò se baila de a cuatro: dos parejas enfrentadas. Las Landas de Gascuña también están vinculadas a otro baile: el rondeau. Tradicionalmente, este baile era una ocasión para que los vecinos se relacionaran durante las fiestas, bodas, carnavales, etcétera. Durante mucho tiempo, fue una de las formas de baile más populares de las Landas, ya fuera en forma cerrada(rondo barrada) o abierta(rondo aubèrta), que se interpretaba en cortas cadenas o en parejas formando un círculo. Existen muchas variantes, según el pueblo o la improvisación de los bailarines. Hoy en día, varias asociaciones redescubren estas danzas tradicionales a través de cursos y eventos de descubrimiento. Es el caso, en particular, de la Association pour la Culture Populaire dans les Landes, que organiza con frecuencia actos culturales.

Las danzas del País Vasco

El País Vasco también tiene una identidad muy fuerte en lo que se refiere a las danzas. Son parte integrante de las fiestas tradicionales y forman parte de la cultura vasca. Se dice que hay casi 200 danzas diferentes en la región, ¡sin contar las variaciones! Aunque no podemos enumerarlas todas, hemos seleccionado algunas. El más emblemático es sin duda el fandango, utilizado en ceremonias oficiales. Originario de las provincias vascas de España, se baila a ritmo de vals. El mutxiko, también conocido como salto vasco, es una danza circular de piernas, codificada por movimientos muy precisos. En la provincia de Soule, el más pequeño de los siete territorios del País Vasco, se practica la mascarada. Es una forma de teatro representada, cantada y bailada al aire libre y en movimiento. Es un conjunto impresionante de danzas con disfraces: los "mascaradiers" van todos disfrazados, los dantzaris de rojo y los agitadores de negro, con un efecto impresionante. Los bailarines desafían a la gravedad y a los elementos, sobre todo en la danza del cristal(Godalet dantza): el bailarín es juzgado por su habilidad para evitar derribar el cristal que tiene a sus pies. Podrá disfrutar de este espectáculo desde finales de enero hasta el domingo de Pascua. ¿Le interesa? Para disfrutar al máximo durante su estancia en la costa de Aquitania, visite la página web del Instituto Cultural Vasco. Encontrará mucha información y un completo calendario de eventos.

El teatro

Además de la mascarada, la pastorada suletina, que se representa en Soule, es una forma de teatro popular vasco. Heredera de los teatros de la Edad Media, la pastorale vuelve a estar de moda desde los años cincuenta. El espectáculo se representa al aire libre: en un prado o, a veces, frente a un frontón vasco. Estas obras cantadas oscilan a menudo entre la tragedia y la comedia, siempre con un final positivo y algunos episodios cómicos. Representan la vida de un personaje vasco, a partir de un tema histórico o religioso, inspirado en relatos medievales y adaptado a nuestro mundo contemporáneo. Las representaciones son todas en euskera y duran casi tres horas, durante las cuales las canciones y las danzas cobran protagonismo. ¿Por qué es tan especial? Todos los actores son aficionados Los habitantes de un pueblo se ofrecen voluntarios para producir una obra que se representa una sola vez en dos ocasiones a lo largo de un año. Desde 2018, esta práctica forma parte del patrimonio cultural inmaterial de Francia.

En las Landas y la Gironda no existe una tradición teatral similar. No obstante, varias compañías se han instalado en la región, atrayendo cada año a numeroso público. Más de un centenar de compañías de teatro tienen su sede en la capital de Gironda. El circo no ha caído en el olvido La compañía Le Roux se fundó en Labenne en 2014. Desde entonces, estos extraordinarios artistas han cosechado grandes éxitos en todo el mundo. Y con razón, las obras son deslumbrantes, tanto cinematográficas como estéticas. Acrobacias de altos vuelos a cargo de los virtuosos del circo Lolita Costet, Grégory Arsenal, Philip Rosenberg y Yannick Thomas. También en las Landas, la compañía C.K.C (Clown Kitch Compagnie) da protagonismo a los payasos promocionando esta forma de arte menos conocida. Un sábado cada dos meses, la compañía ofrece a los aficionados la posibilidad de aprender las técnicas del clown.