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Parque nacional y áreas protegidas

La Guayana Francesa alberga una variedad muy rica de ecosistemas (sabanas, bosques, costas) y tiene un alto índice de endemismo. El territorio cuenta con casi 480 especies de peces de agua dulce y salobre, un tercio de las cuales son endémicas. La selva ecuatorial y su amplio y continuo dosel permiten el mantenimiento de la dinámica evolutiva de la vida. El entorno marino alberga especies raras, como el delfín de Guayana. Para preservar este "punto caliente" de la biodiversidad, se han creado zonas protegidas.

Parque Amazónico de la Guayana Francesa

: creado en 2007, pretende conciliar la protección de los ecosistemas de la selva ecuatorial, las actividades de las comunidades locales y la sensibilización del público. Limitando con el Parque de las Montañas de Tumucumaque, en Brasil, forma una vasta zona protegida que representa el 40% de la Guayana Francesa, en los límites de los ríos Oyapock y Maroni.

Parque Natural Regional de Guayana

: creado en 2001, situado en la costa, incluye tanto una gran variedad de ecosistemas (manglares, marismas, sabanas, bosques) como comunidades humanas. El parque lleva a cabo acciones para proteger la biodiversidad, acoger al público y promover el desarrollo económico.

Reserva Natural Regional del Trésor

: situada en el noreste del territorio, protege los ecosistemas de la montaña de Kaw (bosques, sabanas húmedas). Es posible seguir la "ruta del carbono", una herramienta educativa inaugurada en 2005. Tiene 1,4 km de longitud y proporciona información sobre la relación entre el bosque y el cambio climático.

Reserva Natural Nacional de Nouragues

: situada en el corazón del bosque ecuatorial, alberga una estación científica del CNRS, que ha realizado numerosos estudios científicos.

Reserva Natural Nacional de Kaw-Roura : protege ecosistemas extremadamente ricos, como humedales (marismas), sabanas y bosques de montaña.

Reserva Natural Nacional de Trinité : situada en el centro del territorio y de difícil acceso, presenta una gran diversidad de ambientes: sabanas, bosques de llanura y de montaña, inselberg (pequeño macizo montañoso aislado). Es objeto de estudios científicos e inventarios florísticos.

Reserva Natural Nacional de Amana

: en la costa occidental, alberga manglares y playas, lugares de anidación de tortugas marinas.

Reserva Natural Nacional de la Isla de Grand Connétable

: protege los ecosistemas y la biodiversidad terrestre y marina de estos dos islotes situados frente a la costa de Guyana.

Reserva Natural Nacional de Mont Grand Matoury

: situada en una zona periurbana, conserva más de 2.000 hectáreas de bosque primario y es una zona recreativa y educativa.

Las

principales amenazas para el equilibrio natural son la sobreexplotación de los recursos, la deforestación ilegal y los proyectos de infraestructuras (carreteras, industria, urbanización costera) que contribuyen a la degradación y fragmentación de los entornos naturales

.

Cuando la minería del oro contamina el medio ambiente

La Guayana Francesa tiene oro en su suelo. Este recurso tan codiciado es también la fuente de una gran contaminación. El territorio se ve afectado por el lavado de oro ilegal, realizado en la mayoría de los casos por trabajadores precarios, a menudo procedentes de Brasil. Se calcula que hay unos 10.000 de estos "garimpeiros" en Guyana. La actividad tiene muchos impactos medioambientales: desbroce incontrolado, vertido de bloques de sedimentos en los cursos de agua que alteran el equilibrio ecológico y vertido de mercurio para "atrapar el oro", lo que provoca la contaminación de toda la cadena alimentaria. Además, la acidez del suelo favorece la biodisponibilidad de los metales tóxicos, es decir, su capacidad de ser asimilados por las plantas y los microorganismos. El otro problema medioambiental relacionado con el oro es su extracción. Un proyecto llevado a cabo por la empresa "Montagne d'Or" ha suscitado una fuerte polémica, reacciones de los cargos electos y las asociaciones y acciones judiciales. Originalmente, el proyecto era una mina a cielo abierto en el corazón de la selva guayanesa. Además de la deforestación, la explotación del mineral requeriría la construcción de una infraestructura de carreteras y una central eléctrica de fuel-oil, un proceso de extracción de cianuro, todo ello cerca de una reserva natural y un río. En 2019, el tribunal administrativo de Cayena estimó el recurso de la asociación contra la orden de la prefectura que autorizaba la explotación del yacimiento. En el verano de 2019, el gobierno francés anuncia su decisión de detener el proyecto, a pesar de su apoyo en 2018. En diciembre de 2020, el tribunal administrativo de Cayena, tras el recurso de Montagne d'Or, "obliga al gobierno" a continuar con la concesión. En enero de 2021, el Gobierno presentó un recurso contra esta decisión. En febrero de 2022, el Consejo Constitucional rechazó la prórroga de la concesión minera a raíz de una consulta del Consejo de Estado, y esta decisión podría frenar definitivamente el proyecto minero de Montagne d'or.

La cuestión de los residuos y el saneamiento

El tratamiento de las aguas residuales sigue siendo deficiente y plantea problemas de contaminación ambiental y costera en las zonas urbanas. La gestión de los residuos sigue siendo en gran medida inadecuada y suscita la ira de la población. Un ejemplo es el vertedero al aire libre de Maripasoula, que fue objeto de incendios en 2019, provocando humos tóxicos y el cierre de lugares públicos por motivos de salud.

Enfrentarse al cambio climático

El cambio climático en la Guayana Francesa podría generar una mayor frecuencia e intensidad de eventos extremos: sequías, inundaciones, deslizamientos de tierra, sumersión de la costa. Se han iniciado proyectos de estrategia de bajas emisiones de carbono, basados en la biomasa (incluidas las plantaciones forestales y los cultivos energéticos), pero a menudo se encuentran con la falta de estructura de los sectores. La Guayana Francesa también produce energía solar, a través de la central de Stoupan, e hidroeléctrica. El sector asociativo es muy activo, con programas de sensibilización, estudios e investigaciones, defensa de derechos, pero también acciones para promover la movilidad sostenible.