Rakija
Seguramente ya ha oído hablar de este delicioso aguardiente, un imprescindible producido localmente en toda la zona de los Balcanes, que debería probar al menos una vez. No tendrá problemas para encontrarlo, ya que está disponible en supermercados y pequeños mercados, pero los caseros son los mejores. Así que no dude en preguntar a los lugareños, a los camareros de los bares y a los restaurantes (que suelen ser de la zona) por los mejores lugares donde conseguir rakija casero. Una botella de rakija de producción local es un excelente regalo, ya que este alcohol se conserva muy bien para una ocasión especial.
Njeguški Pršut
La comida local es uno de los placeres de un viaje a Montenegro. Una de las especialidades que hay que probar (y comprar) es su versión del jamón prosciutto, llamada prosciutto montenegrino (Njeguški pršut).
Originario del pequeño pueblo de Njeguši, es un jamón seco que se empapa de todo el aire fresco de la montaña y la costa que lo rodea. Tiene un sabor vivo y agradable que le enganchará enseguida. Se puede comprar envasado al vacío y es fácil de llevar a casa.
Brojanica y la espiritualidad
Para un regalo realmente típico, una brojanica es una buena opción. Se trata de una pequeña pulsera, muy decorada, que también se utiliza para contar oraciones. Están disponibles en diferentes tamaños y diseños para mujeres, hombres y niños.
Tanto si decide utilizarla con fines religiosos o como una joya, es un recuerdo que le evocará el lado espiritual y cultural del país. Se pueden encontrar fácilmente en iglesias y monasterios. En estos últimos también se puede comprar diversa artesanía monástica, como miel, mermelada, aceite de oliva, brandy, vino dulce o cosméticos naturales.
En todos los monasterios se ponen a la venta copias de iconos; por ejemplo, en el monasterio de Ostrog se puede adquirir un icono de san Basilio de Ostrog.
Kapa o sombrero folclórico
Otro recuerdo: la kapa. Es un sombrero tradicional rojo y negro que, aunque no va con todos los looks, combina bien con un abrigo largo en invierno. Ahora forma parte del traje nacional de Montenegro, el negro de la kapa representa el pasado y el rojo las batallas contra los otomanos. Si le gusta la historia, es un buen recuerdo que llevarse a casa.
También puede encontrar joyas, trajes y armas tradicionales en las tiendas de antigüedades de Kotor y Pranj.
Vino de producción local
La mejor variedad de vino se llama vranac y se produce a lo largo de la costa mediterránea. Este delicioso vino tinto, elaborado desde finales de los años setenta, es uno de los productos montenegrinos más populares.
¡Puede llevarse a casa una o dos botellas para disfrutar con su familia y amigos mientras presume de sus fotos!
Recuerdos gatunos
Si visita Kotor en particular, verá por todos lados tiendas de recuerdos con artículos dedicados íntegramente a los gatos. Kotor ama y cuida a sus gatos. Basta con ver el aspecto general de los gatos callejeros en la ciudad. Por eso, en las tiendas verá imanes de nevera, baratijas y todo tipo de recuerdos adornados con diferentes razas de gatos.
Ćilim y tapiz
Si quiere decorar su casa con cortinas o alfombras tradicionales, debe dirigirse a Niti. Es una región del noreste del país conocida por sus excelentes muebles hechos a mano, su artesanía y su ropa.
El ćilim es una alfombra tejida con motivos geométricos y colores brillantes, un recuerdo imprescindible, hecho totalmente a mano con lana auténtica de ovejas locales.
Vinagre de uva
El vinagre de uva, reconocible por su sabor especialmente ácido, se cultiva localmente en todo el país. Puede hallarlo fácilmente en las tiendas de recuerdos, pero le aconsejamos que vaya a las zonas rurales, ya que allí es de producción local y se vende en pequeños mercados y tiendas agrícolas a un precio muy bajo.
Quesos de granja
Ya sea del norte o del sur, la calidad y el método de preparación del queso son tradicionales en Montenegro. Saber que los animales viven en la naturaleza es la garantía de la calidad de la leche. Los quesos se almacenan en tarros de cristal o de plástico, y a veces envasados al vacío para un transporte más cómodo. El kajmak es una especialidad de queso que se elabora con cuajada de leche de vaca, que es bastante suave. Lo encontrará en todas partes combinado con muchos platos, pero también se come simplemente en crema para untar en el pan. En el norte de Montenegro se halla el «queso entero», que es una mezcla de leche de vaca y de oveja. En el sur, se puede degustar el queso de cabra koziji sir. No dude en recorrer los pasillos de los mercados de Bar o Ulcinj para encontrarlo. Existe una variante en forma de bolas de queso de cabra llamada grude. Un poco más al interior, los quesos de Pljevlja, Kolašin y Cevo son productos de calidad, ¡recuerde estos nombres de ciudades si quiere probar absolutamente todos los quesos de Montenegro! Por último, el queso Njeguši, que se conserva en un lugar fresco y aireado hasta tres meses antes de su degustación, está formado por círculos de color amarillo dorado y recuerda a la textura del francés tomme o a la de algunos quesos de montaña de La Garrotxa catalana. Rico en grasa, representa el orgullo nacional montenegrino.
Aceitunas e higos
El aceite de oliva y las aceitunas son de muy buena calidad, especialmente en el sur, en Bar y sus alrededores. Los higos secos (suve smokve) también son una muy buena idea para regalar, se conservan bien y no ocupan mucho espacio en la maleta. También puede encontrar objetos y utensilios de madera de olivo para su casa o para un regalo decorativo en los mercados de las ciudades del norte, como Rožaje, o en la costa.
La hora del café
Si es un amante del café, debería interesarse por la džezva. Se trata de la tradicional vasija de cobre con un largo mango que se utiliza para preparar el café turco. También puede combinarlo con un paquete de café recién molido, el paquete completo para preparar un buen café turco.
Calcetines de lana o popke
Para no pasar frío en invierno en casa, le aconsejamos que no se vaya sin los calcetines de lana hechos a mano llamados popke o priglavci (en el norte, en Pljevlja).
Música
Los amantes de la música pueden elegir una guzla, gusle en montenegrino, una especie de violín de una sola cuerda. Es el instrumento tradicional serbio, que acompaña a las epopeyas y poemas heroicos.
