Lozère, una escena de película
Los paisajes de la Lozère atraen a los cineastas, hasta el punto de que algunos dicen que la Lozère es un plató de cine. Directores de cine y televisión han sabido aprovechar los parajes, la luz y el silencio. Desde finales de los años 90, los equipos de rodaje acuden a la Lozère todos los años, casi sin excepción. Todo el mundo recuerda La Grande Vadrouille, rodada en gran parte en Mende y su aeródromo para la escena final, pero también 37° 2 le matin, Le Bâtard de Dieu, La Belle Verte, sin olvidar Michael Kohlhaas, la película de Arnaud des Pallières, que compitió por la Palma de Oro en Cannes, rodada en parte en la granja Boissets, en el Causse de Sauveterre; o Saint-Jacques... La Mecque, de Coline Serreau. A principios de septiembre de 2013, Luc Besson y su equipo también fueron vistos cerca de Saint-Chély-du-Tarn para el rodaje de Lucy, protagonizada por Scarlett Johansson y Morgan Freeman.
Marine Francen dirigió su último largometraje, Le Semeur, en el magnífico entorno natural de La Garde-Guérin. Rémi sans famille eligió los paisajes de Aubrac en 2018. Otras películas son Antoinette dans les Cévennes, de Caroline Vigna, en 2020, y Les chemins de Pierre, rodada en 2021 y protagonizada por el oscarizado actor Jean Dujardin.
En cuanto a los documentales, el fotógrafo y cineasta Raymond Depardon estrenará Profils paysans, la vie moderne, en tres episodios. Estrenada en 2001, la primera parte de su trilogía se centra en el mundo rural en vías de desaparición, filmando de cerca a Marcel Privat, uno de los últimos pastores de Lozère.
El cine fomenta la cohesión social
Aunque Lozère no dispone de multicines, y sólo cuenta con salas propiamente dichas en las grandes ciudades, no le faltan proyecciones de todo tipo, gracias en particular a la asociación Cinéco, que opera desde las Cevenas hasta el Monte Lozère. Con una programación ecléctica de documentales originales y alternativos y películas recientes, incluso muy recientes, Cinéco viaja de pueblo en pueblo con su equipo de proyección, adaptándose a los lugares. Los precios son atractivos, con posibilidad de abono, y se adaptan a la relativa comodidad de los locales donde tienen lugar las proyecciones. La gran ventaja es poder reunirse en pequeño grupo, sin tener que desplazarse lejos, lo que no es poco en invierno, en un ambiente agradable, dos veces al mes. Programa en www.cineco.org.
En Saint-Chély-d'Apcher, el Ciné-Théâtre ofrece películas los siete días de la semana, así como ciné-débats y ciné-goûters de forma más ocasional. El cine, que atrae a gente de un radio de 30 kilómetros alrededor de la ciudad, también proyecta óperas, ballets y obras de teatro en su pequeño espacio modular. Programa en cinematheatre.wordpress.com.
Una cultura de proximidad
La creación artística en Lozère se extiende por toda la región. Aunque el departamento carece de grandes estructuras culturales, no por ello deja de ser dinámico, con un sistema único que, aunque disperso, da vida a la música, la danza y el teatro en todos los rincones del campo, por remotos que sean. La Escuela Departamental de Música de Lozère desempeña un papel clave en este sentido. Fundada en 1990, cuenta con unos cuarenta profesores y cerca de 800 alumnos, que cantan, tocan y ensayan en uno de los once centros de enseñanza situados en La Canourgue, Florac-Trois-Rivières, Gorges du Tarn Causses (Sainte-Enimie), Grandrieu, Langogne, Marvejols, Massegros Causses Gorges, Mende, Meyrueis, Pont de Montvert-Sud Mont Lozère y Villefort.
Además de enseñar música, la organización trabaja en escuelas, residencias de ancianos e instituciones para discapacitados. Organiza talleres de creación musical asistida por ordenador y desarrolla clases magistrales, cursos, conferencias, encuentros, etc
La Académie internationale de musique et de danse de la Lozère también ofrece una enseñanza musical de calidad en el departamento, a través de cursos organizados exclusivamente durante el verano. Esta estructura, que celebró su cuadragésimo aniversario en 2022, ya ha acogido a más de 15.000 estudiantes de todo el mundo. Los alumnos son principalmente músicos y bailarines, desde principiantes hasta los más experimentados, que acuden a Lozère para prepararse para concursos nacionales o internacionales. Están supervisados por un equipo docente compuesto por profesores de renombre y son invitados a actuar en público en el departamento. Los cursos se imparten en Mende y La Canourgue, con alojamiento en régimen de internado en el Lycée privé Notre-Dame de Mende o en alojamientos elegidos por los propios alumnos.
Un espectáculo viviente
Les Scènes croisées de Lozère es un escenario de promoción y creación de artes escénicas reconocido a nivel nacional en el departamento de Lozère, además de particularmente activo. Como socios del Conseil départemental y de las asociaciones y servicios culturales locales, apoyan a los artistas y ofrecen una programación de espectáculos especialmente densa (teatro, danza, circo, marionetas, artes de calle, etc.). Las temporadas incluyen una cincuentena de citas en distintos lugares de la región: Meyrueis, Mende, Marvejols, Saint-Chély-d'Apcher, Saint-Alban-sur-Limagnole, Bagnols-les-Bains, etc. Las Scènes Croisées de Lozère se han desarrollado siguiendo un modelo itinerante y cubriendo todo el departamento. Programa en scenescroisees.fr.
