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Entre bosques y granjas urbanas

Toronto cuida sus espacios verdes. En 2018, el bosque urbano contaba con unos 11,5 millones de árboles, según el Estudio sobre el Dosel Arbóreo encargado por el Ayuntamiento de Toronto. Este reverdecimiento favorece la salud de los residentes. También contribuye a mantener la biodiversidad, filtrar la contaminación, limitar el aumento de la temperatura, absorber parte del agua de lluvia y atraparel CO2. Algunos espacios naturales dignos de mención:

High Park el Parque de Toronto es uno de los mayores parques de la ciudad, con 161 hectáreas. Alberga espacios naturales e instalaciones deportivas y culturales.

Parque de la Isla de Toronto es una zona de ocio situada en las islas frente al Harbourfront. La travesía en ferry dura unos diez minutos y podrá disfrutar de hermosos paseos a pie y en bicicleta, por no hablar de las playas y los deportes acuáticos.

Rouge National Urban Park: situado en Scarborough y accesible en bicicleta o transporte público, es el mayor parque urbano de Norteamérica. Nada menos.

La construcción de nuevos edificios debe ir acompañada de un tejado verde, a partir de 2010. Estos elementos proporcionan los mismos servicios ecosistémicos que los parques y también contribuyen a limitar el uso del aire acondicionado en los edificios. Algunos de estos tejados albergan huertos, como el de la Universidad Ryerson, que es a la vez un espacio educativo y nutricional para los estudiantes. Las granjas urbanas de Toronto, surgidas del movimiento de agricultura urbana y los huertos comunitarios, se desarrollan en el marco del programa Get Growing Toronto. Ahora florecen en tejados, jardines y terrenos baldíos.

Materiales residuales y gestión del agua potable

El sobrenombre de "capital del cubo de basura" sirve para resaltar el enfoque ejemplar de la ciudad en materia de residuos. El ayuntamiento ha introducido un sistema de recogida selectiva que incluye los biorresiduos. Estos residuos pueden enviarse a un centro de reciclaje o guardarse para compostar en el jardín. La eficacia del sistema se basa en el cobro de tasas por superar los volúmenes autorizados. Este sistema ha reducido considerablemente el volumen de residuos urbanos producidos y el número de traslados a los vertederos.

Toronto también se preocupa por proteger las aguas del lago Ontario. El agua potable de la ciudad se bombea al lago Ontario a través de estaciones de bombeo y tratamiento. También es donde se vierten las aguas residuales tras su tratamiento. El agua del lago también contribuye a reducir los gases de efecto invernadero de la ciudad, gracias a un sistema de aire acondicionado que utiliza este recurso en lugar de combustibles fósiles.

Esfuerzos para combatir el calentamiento global

Toronto está experimentando los efectos del cambio climático con un aumento de la frecuencia de fenómenos extremos, como inundaciones y olas de calor. La ciudad aspira a ser neutra en emisiones de carbono en 2050, lo que se conseguirá mediante diversas actuaciones. Por ejemplo, el Testamento Verde pretende reducir las emisiones de los edificios públicos y privados (aumentando la eficiencia energética para reducir la calefacción y la refrigeración). Aún quedan otras áreas de trabajo, como las emisiones relacionadas con el transporte. El tráfico de automóviles sigue siendo muy predominante y el cambio modal hacia el transporte público y la movilidad activa es aún insuficiente.

Un "sistema" de bicicletas para poner en marcha

La ciudad de Toronto está dotada de instalaciones ciclistas, incluidos cientos de kilómetros de carriles bici, vías de uso compartido y caminos fuera de la carretera, pero su mantenimiento es deficiente. Tras los accidentes y las protestas de los ciclistas, en 2017 el municipio se comprometió con un plan de 13 millones, "La visión cero de la seguridad vial", para mejorar las prácticas de seguridad (mejora de carriles, señalización de intersecciones). Los visitantes podrán aprovechar estas mejoras, siendo los lugares más agradables para ir en bicicleta los situados a lo largo del lago(Waterfront Trail). Toronto también cuenta con un sistema de bicicletas compartidas con 630 estaciones(Bike Share Toronto). Asociaciones como Cycle Toronto se comprometen a promover medidas en favor de un verdadero "sistema" ciclista (equipamientos, reducción del lugar del coche, límites de velocidad, servicios en torno a la bicicleta, etc.). Iniciativas como el Mes dela Bicicleta y el Día dela Bicicleta al Trabajo contribuyen a concienciar sobre el uso de la bicicleta. El Toronto Center for Active Transportation (TCAT) ha abierto talleres participativos de reparación de bicicletas.

Un espacio ecológico alternativo

Evergreen Brick Works es lo que podríamos llamar un "tercer lugar". Esta antigua fábrica de ladrillos acoge ahora experimentos ecológicos participativos, conferencias y actos, así como un mercado de flores autóctonas de Ontario, un programa artístico (instalaciones, artes escénicas, artistas residentes, etc.) y un mercado de agricultores todos los sábados (al aire libre de mayo a finales de octubre, en la CHR Gallery el resto del año).

Quayside: un proyecto de desarrollo a tener en cuenta

Tras el estrepitoso fracaso del barrio inteligente de Sidewalk Labs en 2020, surge un nuevo proyecto para el frente marítimo de Quayside. Este frente marítimo representa una oportunidad extraordinaria para crear una de las comunidades con bajas emisiones de carbono más sostenibles del país, al servicio de personas de todas las edades, orígenes, capacidades e ingresos. Un lugar acogedor y vibrante durante todo el año, que ofrece tiendas, restaurantes, entretenimiento y experiencias culturales (muy en la línea del Distrito Histórico de la Destilería), por no hablar de viviendas, zonas verdes y un gran jardín comunitario en la azotea para disfrute de los residentes. Quayside será la mayor comunidad totalmente eléctrica y sin emisiones de carbono prevista en Canadá, con unos 7.500 residentes y 1.600 puestos de trabajo.