Restaurantes cocina del Próximo y Medio Oriente Turquía

A treinta minutos de Esmirna, este restaurante gastronómico ofrece una cocina refinada y moderna en un jardín rodeado de olivos.Todo ha sido cuidadosamente pensado y meticulosamente ejecutado, desde el entrante hasta el postre. Los platos que vaya a degustar se le explicarán sobre la marcha. Interesante carta de vinos locales y delicioso cóctel de acedera. Es más caro que otros sitios, pero está pagando la calidad. El restaurante cuenta con un pequeño y acogedor hotel-boutique vitícola para los huéspedes que deseen dormir allí. Infórmese.

Es el tipo de restaurante que no se olvida pronto de lo contento que se sale. Zeytun cumple todos los requisitos. En primer lugar, tiene una maravillosa terraza con sombra junto al agua donde podría pasarse todo el día. En segundo lugar, le reciben con muchísima amabilidad. Puede elegir su mezze favorito de la vitrina o dejarse guiar por los amabilísimos camareros si le resulta demasiado difícil. El pescado se pesca por la mañana y se vende al peso. Mire los precios antes de nada. Todo es casero. Buena selección de vinos locales y extranjeros. Es un gran sitio.

Es un lugar escondido, de los muchos que hay en Estambul. Una vez que llegue a la sexta planta, se abrirá ante usted una magnífica vista del Cuerno de Oro. Este selecto restaurante ofrece deliciosas especialidades turcas, así como de cocina internacional. Recomendamos especialmente el sultan kebabı, acompañado de un puré de berenjena. La carta ofrece varios tipos de vinos. Algunas tardes, hay músicos que tocan los clásicos turcos. Un restaurante perfecto para una velada romántica o simplemente para tomar una copa y disfrutar de la vista.

Si una noche en el Çırağan no entra en su presupuesto, regálese un lujoso brunch, almuerzo o merienda en el salón Gazebo, uno de los restaurantes del legendario palacio. Siéntese cómodamente en la espléndida terraza y disfrute de la impresionante vista del Bósforo. La cocina es refinada: mezes clásicos pero elegantes, cordero confitado cocinado en su punto y postres diabólicos. También encontrará clásicos internacionales en la carta. El atento servicio es obviamente digno de un palacio. Reserva obligatoria.

Sakir, el dueño, lleva recibiendo a los comensales desde 2005 con una sonrisa y le ofrecerá una excelente cocina regional basada en productos frescos a un precio muy razonable (algo bastante raro en Bodrum). Aquí todo se elabora al momento y las raciones son muy generosas. Gran selección de kebabs (el adana dürüm con su sazonamiento perfecto es una delicia), sopas (recomendamos la de lentejas rojas), lahmacun y auténticos platos locales. Servicio amable y rápido. Comida para llevar y también servicio a domicilio.

Este establecimiento se encuentra en el puerto deportivo y es un gran sitio para probar el famoso manti, además de muchas otras delicias, como las fantásticas albóndigas o el delicioso cökertme kebabı. Como entrante, pruebe el queso halloumi. Todo se prepara por encargo. El restaurante no sirve alcohol, pero tiene una excelente limonada casera, perfecta para refrescarse después de un largo paseo. El té y el café corren por cuenta de la casa. Camareros amables y buen ambiente. Precios razonables, lo que es bastante raro en el centro de Bodrum.

Este restaurante es uno de los más antiguos de Bodrum, y se puede llegar desde el bazar o desde el puerto deportivo. Está situado en una placita muy céntrica a la sombra y es el lugar perfecto para probar el famoso döner de Bodrum con verduras: una brocheta de carne con verduras. Está riquísima. Las carnes son de buena calidad, el pan se hace al momento y el personal es amable. Es un restaurante muy popular entre los lugareños y está muy concurrido. La buena noticia es que en verano está abierto las 24 horas del día. ¿Le apetece comida campesina a las cuatro de la mañana? ¡Hoş geldiniz!

Café, bar y restaurante, el Balkon abrió sus puertas en 2004 y es el lugar ideal para comer especialidades locales (el desayuno turco en particular), así como platos más clásicos, como pizzas. Todo está sabroso. También puede tomar un té a cualquier hora del día y contemplar la increíble vista del casco antiguo desde la terraza o tomar un aperitivo antes de cenar para disfrutar de la puesta de sol. La carta de vinos es honesta, y los precios también. Por la noche, el local se convierte en un bar lounge, a menudo abarrotado, pero aun así agradable. Buen ambiente.

Un pequeño y encantador establecimiento en un callejón tranquilo sobre la torre de Gálata. El local destaca por sus desayunos y su amplia selección de mermeladas caseras. Después de desayunar aquí, olvídese del almuerzo, porque ya no tendrá más apetito. Los almuerzos y las cenas están al mismo nivel. La carta varía en función de la inspiración del chef y de los productos de temporada que se encuentren en el mercado. Es un buen lugar para disfrutar de un momento de relajación. Acceso a wifi. Y por la noche se puede venir a tomar una copa.

Si no supiera lo que le espera dentro, pasaría de largo sin dudarlo. Pero algunas pistas no engañan: la sala y las pocas mesas de la acera suelen estar siempre llenas de estambulíes que vienen a saborear una cocina casera, copiosa, sabrosa y barata. El menú cambia cada día, solo hay que elegir entre los platos preparados por la cocina abierta. Por unas cuantas liras, tiene sopa, un trozo de musaka, un salteado de ternera o pollo... En definitiva, una pequeña y agradable cantina de barrio.

Lo que diferencia a Çirali de otras cadenas es que aquí la carne se asa al carbón, lo que potencia el sabor del döner. Elegirá qué carne quiere al peso. Si tiene hambre, el kebap iskender, con sus largas lonchas de carne, le alegrará el día, y si tiene mucha, mucha hambre, opte por el plato completo con verduras y arroz. El pan lavash, el pan tradicional turco, está delicioso y es perfecto para acompañar un dürüm de cordero. El beyti kebab está exquisito. Servicio eficiente y amable.

Solo doce cubiertos, obligado reservar. Se trata de una dirección poco común en medio de los viñedos, bajo los pinos, en una maravillosa casa de campo, donde se combinan el lujo y la sinceridad. Maya, que significa «levadura» en turco y en griego, hace referencia al pan elaborado con levadura y la harina de trigo ancestral de Anatolia, procedente del molino de la casa. Selçuk Aykan, el chef, cocina la carne con maestría. También hace su propio queso. Las verduras proceden de su huerto o de los agricultores de la isla. Puede pasear por los viñedos mientras toma una copa de vino.