Parques naturales, áreas protegidas y turismo verde
Eslovenia se ha comprometido a proteger y mejorar su excepcional biodiversidad y sus paisajes. Prueba de ello son el oso esloveno, cuya población sigue creciendo, y la protée, una pequeña salamandra, símbolo del país y especie indicadora de la calidad de sus ecosistemas. Ciclistas y excursionistas encontrarán mucho que hacer en las carreteras y senderos de este magnífico país. El Gobierno fomenta el ecoturismo y promueve la concienciación medioambiental entre sus visitantes. Encontrará toda una lista de establecimientos con la etiqueta verde de Eslovenia. El Parque Nacional de Triglav, que debe su nombre al pico más alto del país (2.864 m), es un tesoro por explorar. Los visitantes descubrirán paisajes únicos y grandiosos: valles glaciares, prados alpinos, lagos turquesa, bosques y flora y fauna endémicas. Los parques regionales completan la lista de espacios naturales protegidos del país: el parque regional de Kozjansko, clasificado como reserva de la biosfera, le permitirá descubrir prados floridos, huertos, viñedos y castillos. El parque regional de Notranjska, incluido en la lista Ramsar, una vasta llanura rodeada de montañas, ofrece un ambiente lacustre a través de hermosas rutas de ciclismo y senderismo. El Parque de las Cuevas de Škocjan, no sólo sitio Ramsar sino también Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, ofrece una ruta única a través de uno de los cañones subterráneos más grandes del mundo. El parque natural de las salinas de Sečovlje, cerca de la costa, tiene tanto interés cultural, ligado a la historia de las salinas, como naturalístico, para la observación de aves. Por último, está el parque natural de Goričko, una zona de colinas entre la naturaleza y la cultura, ideal para el ciclismo, y el parque natural de Logarska dolina, un magnífico parque alpino para visitar en cualquier estación.
Gestión de residuos: un modelo de éxito
En menos de dos décadas, Eslovenia ha implantado un modelo eficaz de gestión de sus residuos, basado en la educación en materia de clasificación en la escuela, la participación de los residentes locales y unas instalaciones de alto rendimiento. La recogida se basa en puntos de entrega voluntaria y los residuos se envían a centros de clasificación. Como resultado, el país tiene uno de los mejores índices de recuperación de residuos de la Unión Europea. La capital fue la primera en embarcarse en un planteamiento de cero residuos en 2015. En Liubliana, los residentes han reducido su producción anual de residuos de 268 kg por persona en 2004 a 110 kg en 2019, con el objetivo de alcanzar los 60 kg en 2025.
Agua potable de alta calidad
La calidad del agua potable del país es uno de sus mayores logros. Ansiosos por preservar este preciado recurso, los parlamentarios consagraron el derecho al agua potable en la Constitución del país en 2016. Una primicia en Europa. Esto significa que "todos tienen derecho al agua potable" y que "no es una mercancía", en palabras de la Constitución. En otras palabras, se trata de garantizar la gestión pública del recurso y protegerlo de la especulación y la codicia del sector privado. Sin embargo, hay un inconveniente en la aplicación de este derecho: el acceso al agua potable en los campamentos de familias romaníes no se ha establecido en el país, como ha lamentado la ONG Amnistía Internacional.
Liubliana, capital verde de Europa
Ganadora del premio Capital Verde Europea en 2016, Liubliana es verde en muchos sentidos. En el primer sentido de la palabra, porque la ciudad ha plantado muchos árboles, pero también ha reurbanizado aparcamientos y terrenos industriales baldíos para convertirlos en zonas verdes. Grandes parques arbolados rodean la ciudad y es un placer pasear por ellos en cualquier estación. En cuanto a movilidad sostenible, la ciudad ha dado un verdadero paso adelante, pasando de una política exclusivamente automovilística a promover la movilidad activa: bicicletas de autoservicio, peatonalización del centro. En cuanto al transporte alternativo, un minibús eléctrico gratuito, Kavalir, circula por el centro de la ciudad, y se han instalado puntos de recarga eléctrica. Como resultado, la calidad del aire está mejorando y el tráfico se está calmando. La única pega es el coche, que nunca está lejos los días de lluvia, y la red ferroviaria, que no siempre es eficaz, según algunas asociaciones.
Contaminación atmosférica y energía: temas sensibles
Tras la imagen de postal, el enfoque del país en materia de medio ambiente en su conjunto sigue siendo inadecuado en algunos aspectos, con deficiencias sobre todo en los ámbitos de la contaminación atmosférica y la gestión de los gases de efecto invernadero. En enero de 2018, por ejemplo, el país fue llamado al orden por la Comisión Europea por incumplir los límites de contaminación atmosférica. Esto se debe principalmente a las emisiones de la industria. A esto se suman los vertidos de aguas residuales domésticas, agrícolas e industriales que amenazan los ecosistemas fluviales y , en última instancia, el mar. En Eslovenia también se cuestionan las opciones energéticas. Las asociaciones se han manifestado en contra de la decisión del anterior gobierno de instalar tres centrales hidroeléctricas en ríos hasta entonces sin explotar para preservar la biodiversidad. Aunque el país pretende eliminar los motores de combustión interna de aquí a 2030 para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero, han surgido planes para explotar gas de esquisto mediante facturación hidráulica, a los que se opuso en 2018 el ministro responsable de Medio Ambiente. Las cuestiones económicas y las crisis migratorias también parecen haber relegado las cuestiones ecológicas a un segundo plano en el país. En consecuencia, el medio ambiente no ha sido un tema movilizador en las elecciones europeas de 2019. Pero los activistas se mantienen alerta y activos, como este David esloveno que derriba al Goliat de Lafarge. Tras quince años de lucha, Uroš Macerl, agricultor y ecologista, consiguió cerrar la planta de la cementera francesa, que dañaba el medio ambiente y la salud de los habitantes del valle de Trbovje al incinerar residuos. Estos esfuerzos fueron reconocidos con la concesión del Premio Goldman de Medio Ambiente en 2017.
Por último, la llegada a la escena política de Robert Golob, ganador de las elecciones parlamentarias de abril de 2022 y antiguo director de una empresa eléctrica especializada en energía solar, es una señal positiva para el medio ambiente.
