BISTROT DE LA MER
leer másAngélique le da la bienvenida a este cálido restaurante familiar donde podrá degustar platos clásicos, centrados en especialidades marineras, todas muy bien ejecutadas. No tardará en probar las croquetas de gambas, la deliciosa meunière de lenguado y los magníficos mejillones preparados con esmero. El servicio no tiene pretensiones. Nos encanta el ambiente familiar que emana del local. Todo es casero, hasta el pan horneado por la chef Carole. ¿Y qué más? Una bonita terraza de madera donde tomar el sol cuando hace buen tiempo.
LA BONNE CHÈRE
leer másAlexandru Sapco, de origen moldavo, es el chef de esta joya gastronómica enclavada en las Marolles. En primer lugar, se entra en esta antigua casa con un ambiente acogedor (mucha madera, ladrillos, luz tenue) antes de dejarse llevar por el joven equipo del restaurante. A la hora del almuerzo, usted elige el menú de la comida o puede elegir de un menú limitado (2 opciones por servicio). Por la noche, podrá deleitarse con el menú. La cocina de Alexandru es viva y creativa, como en el caso de un magnífico membrillo confitado, baba y helado de lima. Los vinos moldavos están disponibles bajo petición.
GRAANMARKT 13
leer másGraanmarkt, una boutique de lujo en el piso de arriba y un restaurante bistronómico en el de abajo, es una combinación perfecta de estética y placer. En la zona del restaurante, todo es bonito, desde la vajilla hasta la iluminación, y el blanco de las paredes lo realza a la perfección. El menú es igual de crudo: 3 entrantes, 3 platos principales, 2 postres (o quesos). En el plato, son las verduras las que resultan sublimes (el restaurante fue elegido mejor restaurante de verduras de Flandes), como este (engañosamente sencillo) festín de judías, alubias al tomillo y setas shiitake que acompañaba a un entrecot de Frisonne.
LES POTES AU FEU
leer másLes potes son dos jóvenes entusiastas, François y Damien, que se embarcaron en esta aventura en febrero de 2020. Su carta ofrece frescura y estacionalidad en dos entrantes (setas a las 3 formas o vieiras asadas), dos platos principales (carne de caza belga o pesca del día) y otros tantos postres. El restaurante es muy recomendable, tanto por su marco contemporáneo con vistas al río como por su cocina gastronómica contemporánea. También nos gustaría mencionar el alegre servicio: François y Damien se acercan a su mesa para presentarle sus platos.
BISTRO LE NORD
leer másEste hermoso restaurante ofrece cocina francesa con influencias muy creativas. Pero no hay prisa: ¡los platos se disfrutan mejor con los ojos! Se presta gran atención a los detalles. El servicio es joven, dinámico y profesional. La decoración es refinada y muy acertada. El restaurante es muy popular en la región. El bacalao y las chuletas con hueso están muy solicitados. Una parada obligada Y no lo olvide: ¡el restaurante también ofrece alojamiento y desayuno de alta gama! ¡Suficiente para seguir disfrutando!
MÊZON DE BOUCHE
leer másEste establecimiento de reciente apertura ya se ha hecho un nombre por su excelencia. En un entorno bucólico, en lo que parece una granja, Xavier Catoul, el chef, y Sandrine Cuzon le dan la bienvenida en un viaje gastronómico a través de los clásicos de la cocina francesa. Cuando se trata de los clásicos, es difícil hacer trampas: la sencillez y la perfección de ejecución están a la orden del día. Mêzon acepta el reto: mollejas de ternera a la parrilla, pierna de conejo a la provenzal, tarta hojaldrada de manzana y helado de pistacho. Una auténtica delicia En cuanto al vino, Mathieu Closset no pierde detalle.
BAGÙ
leer másSophie y Steven abrieron Le Bagù en octubre de 2022 y ya están recibiendo críticas muy favorables. El nombre sugiere una influencia mediterránea en el menú (cambia B por R y tendrás ragú). El menú es corto, para reflejar las estaciones. Cocina bistronómica cuidadosamente elaborada, combinaciones originales, una carta de vinos sorprendente y un ambiente acogedor (admire el papel pintado) ponen a todo el mundo de acuerdo. La guinda del pastel: un servicio amable y atento y una gran terraza para disfrutar del buen tiempo.
VIER
leer másBas y An tienen una amplia experiencia en restauración. Acaban de abrir una mesa en el magnífico claustro de una antigua clínica. En el plato, aunque las raciones son limitadas, esta elección garantiza la frescura y la estacionalidad de los productos, que se subliman al detalle. En otoño, por ejemplo, se puede degustar caballa marinada como entrante, cordero al romero y ensalada de legumbres como plato principal, terminando con un delicioso helado de ruibarbo con yogur y miel. Los sabores están bien equilibrados y los platos se presentan con elegancia.
GASTON VOUZÔTE
leer másGaston Vouzôte (vouzôte es una expresión local que significa "vosotros") es una brasserie contemporánea de lujo. Una institución firmemente arraigada en su región, con su mezcla de culturas culinarias francesa y belga: caracoles de Kain (cerca de Tournai), terrina de temporada, blanquette de veau... Junto a esto, encontrará toda una selección de carne irlandesa o argentina asada en horno Mibrasa. Venga con el estómago abierto, pues las raciones son copiosas. Servicio alegre y terraza llena en cuanto sale el sol.
RIZOM
leer másRestaurante y cafetería en Grand-Hornu, el menú de Rizom refleja el crisol de gentes que solían cavar carbón en las minas, y se inspira en una variedad de raíces: belga, francesa, italiana, española, salpicada de toques asiáticos. Los entrantes y platos de temporada se presentan en versión vegana, de pescado o de carne, pero los platos son siempre pequeñas obras maestras, con sabores vivos pero equilibrados. También hay 3 tipos de acompañamiento: vinos belgas, cervezas y fermentaciones sin alcohol. Decoración muy de diseño.
LE SELECTO
leer másAquí hay un toque parisino, y no es para menos, este establecimiento bistronómico dice formar parte de esta nueva tradición francesa, que combina un ambiente relajado con un plato que hace honor a su nombre. Todas las claves están ahí: un menú corto (5 entrantes, platos principales y postres), un plato y una comida del día, productos de temporada y una buena lista de vinos favoritos. El chef Olivier Morland ha acertado. ¿Un ejemplo de esta filosofía? El confit de cerdo de granja estaba como la mantequilla, con una buena salsa como debe ser. En el mostrador, ¡comemos en el bar!