Parques y reservas ricos en fauna
Con más de 400 especies de mamíferos, unos 700 ejemplares de aves y más de 900 mariposas de vivos colores, Congo-Brazzaville lo tiene todo para convertirse en uno de los principales destinos ecoturísticos del continente africano. Los parques y reservas nacionales cubren más del 13% de su territorio y albergan una fauna rica y variada, incluidas algunas especies raras y amenazadas como el chacal rayado y el gorila occidental de llanura. Víctima de la caza furtiva y la deforestación, además de la epidemia de ébola que causó la pérdida de casi la mitad de la población de gorilas del país en 2000, ahora sólo quedan unos 3.000 ejemplares en el Congo. Se les puede ver en varios parques y reservas del país, como la reserva Lésio Louna Sud Léfini, que alberga un proyecto de protección de gorilas creado por la Fundación Aspinall. Aquí se protege a los huérfanos cuyos padres han muerto a manos de cazadores furtivos con el objetivo de reintegrarlos en la naturaleza. El chimpancé, el animal más expresivo de la selva tropical, es también una especie amenazada debido a la deforestación y al consumo de su carne. Sin embargo, se cree que los chimpancés de África Central forman una población de unos 80.000 individuos. Se organizan en comunidades de entre 20 y 100 individuos, generalmente divididas en subgrupos cuya composición fluctúa. Se encuentran en prácticamente todos los parques y reservas del país, incluido el santuario de Tchimpounga, a 50 km al norte de Pointe-Noire, que ofrece un refugio sin precedentes para primates huérfanos. Considerado en peligro crítico desde 2021, el elefante de bosque también está muy presente en el país, sobre todo en el extremo norte. Más pequeño que su primo el elefante de sabana, tiene unas orejas menos imponentes y una piel gris y arrugada, a veces fruto de su entorno oscuro y húmedo. Hay que señalar, sin embargo, que en el Congo no hay jirafas ni cebras, que prefieren los espacios abiertos de las sabanas, donde pueden ver venir de lejos a los carnívoros y reunirse. Los grandes rebaños no existen en la selva, ya que el entorno no se adapta a su organización y necesidades. Por eso hay pocos grandes herbívoros en el Congo y, en consecuencia, pocos leones, que sólo se encuentran en el parque de Odzaka. Sin embargo, si se tiene suerte, se pueden avistar leopardos en los parques de Odzaka y Conkouati-Douli, así como en la reserva comunitaria del lago Télé. Son exclusivamente carnívoros y sus presas suelen ser jabalíes, monos y puercoespines. Su pelaje suele ser de color más claro cuando vive en la sabana y más gris en las zonas boscosas. Entre las muchas especies de antílopes está el bongo, el mayor de los antílopes del bosque -hasta 1,25 m y 230 kg- que se encuentra en el Parque Odzala-Kokoua. Es un animal nocturno que se alimenta de raíces, semillas y frutos, con un marcado gusto por el tuétano de las lianas y la madera podrida. Otra especie poco estudiada es el gato dorado africano, endémico de los bosques de la costa occidental de África. Es aproximadamente el doble de grande que un gato doméstico y su color varía del marrón anaranjado al gris, con la garganta, las mejillas y el vientre blancos. Carnívoro, se alimenta de aves y pequeños mamíferos, y sus depredadores son los cazadores furtivos y las panteras. Animal muy discreto y furtivo, da pocas oportunidades a los visitantes para contemplarlo.
Una variada fauna acuática
Con casi 170 km de costa, rodeada por el océano Atlántico, el país alberga numerosas especies de peces. Entre ellas destacan el mero, el sábalo, la dorada, la carpa roja, la barracuda, el jurel y la raya guitarra. Cien kilómetros al norte de Pointe-Noire, la laguna de Conkouati es un santuario de manatíes y tortugas marinas, entre ellas la tortuga laúd, la mayor especie conocida de tortuga marina, que puede alcanzar los 2 m de longitud y pesar 350 kg. En el suroeste del país, el parque de Conkouati es conocido como la segunda zona de anidamiento más grande del mundo. La laguna, abierta al océano, alberga peces de agua dulce y salada, un paraíso para los pescadores. Durante la estación seca, se pueden avistar ballenas jorobadas frente a la costa de Pointe-Noire. Atravesado por ríos y pantanos, el país también alberga muchos peces de agua dulce, como la carpa, el patrón y el pez tigre. Sin embargo, en la estación seca escasea el pescado de agua dulce en los mercados, que se vende a precios desorbitados para los habitantes.
Avifauna excepcional
Con más de 700 especies de aves, entre ellas más de cien en la isla de M'bamou, Congo-Brazzaville es un paraíso para los observadores de aves. En todo el país se puede observar una gran variedad de martines pescadores, rollers, cálaos, abejarucos, dendrocygnes y halcones. Los humedales congoleños son frecuentados por gansos de Gambia, flamencos rosas, cigüeñas, marabúes y garcetas pequeñas, entre otras especies. Entre las aves raras figuran el avetoro de Sturm, una pequeña garza de la familia Ardeidae, el alcatraz del Cabo, el bateleur de sabana y la oropéndola cabecinegra.
Flora exuberante pero poco conocida
Compuesta por bosques de galería, sabanas arboladas e islas forestales, la flora congoleña es una de las más ricas de África, con más de 10.000 especies vegetales, 3.000 de las cuales son endémicas. Sin embargo, se sabe poco de ella y la investigación sigue en curso. El parque Odzala-Kokoua alberga una densa flora específica de los bosques tropicales húmedos, conocida como maranthacea. Estas plantas herbáceas muy evolucionadas forman un bosque denso y oscuro donde a los gorilas les gusta esconderse y comer las hojas, que son una fuente de proteínas, lípidos y fósforo. También hay especies más conocidas, como el quesero, la palmera aceitera, la enredadera del caucho, distintas variedades de plataneros y el árbol del ajo, perteneciente a la familia de las huáceas.
