Restaurante locavore con un ambiente familiar donde el chef prepara una cocina de abuela con un toque vintage de productos frescos
Laëtitia, Florian y todo su equipo han apostado por las expectativas de muchos amantes de la restauración y la gastronomía: totalmente locavore, fresca, francesa y de temporada, de aprovisionamiento ecológico o razonado. El servicio es impecable y generoso, al igual que la cocina. En un marco con aire campestre y familiar, l'Abenfant - "el hijo del bisnieto" en francés antiguo- ofrece platos únicos y combinaciones asociadas al saber de antaño. 3 entrantes, 3 platos principales, 3 postres y, si se desea, una alternativa vegetariana. La carta de vinos ecológicos, biodinámicos y naturales es extensa... Con una política de cero residuos, ¡l'Abenfant promete deleitar sin estropear!
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Información y horarios en L'ABENFANT
Abierto de martes a sábado de 9.00 a 14.00 y de 19.00 a 21.00. Cerrado el primer martes de cada mes. Menús de 27 € a 32 €. Menú a la carta: aprox. 20 € (plato único). Vale de restaurante.
Mensaje de la Dirección
L'ABENFANT es un restaurante de Dijon que ofrece una cocina casera tradicional que recuerda a la de nuestras abuelas. Aquí tendrá la oportunidad de saborear una cocina a la vez sencilla y generosa, modernizada con un toque de ligereza. Los platos se elaboran exclusivamente con productos franceses frescos y de temporada. Los ingredientes locales, cuidadosamente seleccionados por su calidad ecológica y su producción responsable, proceden de productores apasionados. En lugar de chocolate, vainilla, café y frutas exóticas, el establecimiento utiliza multitud de cereales, plantas y flores. Entre las especialidades figuran el Kofé, el Orgé y el Pâté en croûte. La carta también ofrece una amplia selección de vinos y bebidas para acompañar la comida. Hay menús diarios para todos los gustos. No hay duda de que se trata de un lugar magnífico para visitar
Opiniones de los miembros sobre L'ABENFANT
Le cadre est super sympa et le service top
à revisiter sans soucis
Les serveurs et serveuses sont très sympathique.
Des produits locaux et bio, les vins également.
La décoration d'antan est superbe.
L'apéritif maison et le cocktail qui va avec le dessert que vous avez choisi sont originaux et très bon.
Et la cuisine, on est toujours surpris et jamais déçu.
Je recommande.