Florencia y sus alrededores, entornos a preservar
Para combatir la contaminación del tráfico, la ciudad ha reducido gradualmente el número de coches en circulación durante los últimos diez años. Hoy, todo el centro de Florencia es una ZTL(zona a traffico limitato), donde sólo pueden circular taxis, autobuses y conductores con un permiso especial. La entrada a esta zona está controlada por cámaras que leen las matrículas. Se anuncia mediante señales claramente visibles. Al mismo tiempo, se ha desarrollado el transporte público y la ciudad cuenta con una buena red de autobuses y tranvías.
No es muy aconsejable circular en bicicleta por el centro de Florencia, pero hay dos carriles bici que permiten realizar magníficos paseos.La ciclovía del Arno se extiende a lo largo de 270 kilómetros, desde el nacimiento del río en el monte Falterona, pasando por Florencia, hasta su desembocadura cerca de Pisa. En la ciudad, este carril bici comienza en la iglesia de San Andrea di Rovezzano y alterna las orillas izquierda y derecha del Arno. Otro itinerario bien desarrollado tanto para peatones como para ciclistas, elCamino del Renacimiento (Anello del Rinascimento) es un círculo de 172 kilómetros alrededor de la ciudad, que pasa por las principales atracciones turísticas de las afueras y por numerosos pueblos como Fiesole, Calenzano y Vaglia.
Parques y jardines
El Departamento de Medio Ambiente de Florencia gestiona más de 400 espacios verdes, con una superficie total de 375 hectáreas. El mayor espacio verde de la ciudad es el Parco delle Cascine, de 160 hectáreas, justo al borde del centro histórico. Se trata de una franja verde que recorre 3,5 kilómetros a lo largo del Arno hasta el río Mugnone, y que antaño fue coto de caza de los Médicis. Cuenta con terrenos deportivos, una piscina y dos hipódromos. La segunda mayor zona verde es el Parque Anconella, de 30 hectáreas. Es un lugar ideal para picnics y actividades de ocio.
El jardín más elegante y conocido es el Giardino Boboli. Alberga esculturas en medio de masas de agua, fuentes con nenúfares, pequeños templos y grutas artificiales. No muy lejos, el Giardino Bardini y su villa ofrecen hermosas vistas panorámicas de la ciudad. El Giardino Bardini está dividido en tres partes: el huerto al este, la escalinata barroca en el centro y el jardín inglés al oeste. Por último, para los amantes de las plantas, el Giardino dell'Iris alberga más de 2.000 variedades de iris. Cada año, entre abril y mayo, se celebra aquí el concurso "International dell'Iris", organizado desde 1954 y abierto al público. La Rosaleda (Giardino delle Rose) alberga más de 350 variedades de rosas.
Comer bien, un arte de vivir
No es difícil encontrar productos frescos, locales y sin pesticidas en la Toscana. El Mercato Centrale es una visita obligada para abastecerse de delicias locales como aceite de oliva, vino y queso. Menos conocido es el mercado de La Fierucola, que se celebra cada tercer domingo de mes en la Piazza Santo Spirito y está dedicado a los productos ecológicos. Otro lugar donde comprar productos naturales, esta vez cosméticos, es la Officina Profumo-Farmaceutica di Santa Maria Novella, anexa a la basílica de Santa Maria Novella. Esta antigua farmacia, que bien merece una visita, ofrece perfumes artesanales, productos de cuidado corporal y dulces protegidos por una etiqueta de origen controlado. Desde 2016, la legislación prohíbe el establecimiento de cualquier restaurante que utilice productos precocinados y congelados en el centro histórico. McDonald's intentó instalarse en la Piazza del Duomo hace unos años, ofreciendo una fórmula local, pero los florentinos y su alcalde lo rechazaron. No olvidemos que Italia es el país que inventó la "comida lenta"
Las reglas de la vida para el turista respetuoso con el medio ambiente
La ciudad de Florencia ha lanzado la campaña #EnjoyRespectFirenze, que anima a los turistas a adoptar un comportamiento más respetuoso. Estas son algunas de las normas que recomienda: planificar el viaje, utilizar los aseos públicos o los de los bares o restaurantes donde se beba, llevar una botella reutilizable para beber el agua potable de las fuentes (incluso hay agua con gas en la Piazza della Signoria), respetar los lugares de culto, hacer picnic en zonas adecuadas (y no en las escaleras de iglesias o monumentos), comprar productos artesanales y degustar los productos locales.
Los florentinos clasifican su basura. Los residuos no reciclables van a los contenedores azules, el papel a los amarillos, el vidrio a los contenedores azules con forma de campana y los residuos orgánicos a los contenedores marrones con etiquetas verdes.
Desde 2025, cuando entró en vigor el programa "Turismo sostenible y ciudad agradable para vivir", la alcaldesa de Florencia, Sara Furano, ha querido limitar el fenómeno del turismo excesivo, ante la afluencia masiva de turistas y la crisis de vivienda de sus habitantes.
Los Parques Nacionales de los alrededores
La Toscana cuenta con algunos de los parques más bellos de Italia. El Parque Nacional del Archipiélago Toscano, creado en 1996, es el mayor parque marino de Europa. Incluye una parte terrestre, además de las islas de Elba, Giglio, Capraia, Montecristo, Pianosa, Giannutri y Gorgona, y 56.766 hectáreas de mar. El archipiélago alberga una fauna especial: tejones, martas, mariposas Coenonympha elbana y numerosos lagartos pequeños. En la isla de Montecristo, no es raro cruzarse con la cabra salvaje Capra aegagrus hircus. En el Parque Nacional de los Apeninos Tosco-Emilianos, entre rocas, lagos y prados, podrá avistar una oveja muflona, un corzo o un águila real, o recoger unos deliciosos arándanos. Dentro del parque, la Reserva Natural de Orecchiella se creó en 1980 para preservar la extraordinaria variedad de flora y fauna de los Alpes Apuanos. El Parque Nacional de los Bosques del Casentino abarca una vasta zona de bosques de abetos, hayas y castaños entre Toscana y Emilia-Romaña.
El Parco naturale della Maremma, creado en 1975, se extiende a lo largo de la costa tirrena sobre 9.800 hectáreas y contiene una preciosa variedad de ecosistemas, como las dunas de Uccellina. El Parque Regional de los Alpes Apuanos, entre las provincias de Massa Carrara y Lucca, con su soberbia cordillera blanca como el marfil a tiro de piedra del mar, es otro de los rasgos distintivos de la Toscana.