Los mejores restaurantes de cocina francesa República Dominicana

Stéphane y Amel le dan la bienvenida a este pequeño bistro típicamente francés. La pintura mural se presta a equivocación: uno creería que está en un Montmartre sobre el trópico. Lo más destacado son las grandes especialidades francesas (bourguignon de ternera, blanquette de ternera, calamares a la provenzal, sopa de cebolla, ensalada de queso de cabra caliente), con platos típicos de diferentes regiones de Francia: fondue bourguignonne, plato de embutidos y pierrade (avisar 48 horas antes para la pierrade, mínimo 3-4 personas). El filete de ternera al horno gratinado con queso parmesano es una delicia. Buena carta de vinos.

Stéphane le recibe de la mañana a la noche. Empiece con el delicioso desayuno continental o el típico desayuno europeo, gurmé y copioso. El pan se cuece en la panadería adyacente, así como los cruasanes y los pains au chocolat. Al mediodía, puede disfrutar de productos frescos bajo la típica cabaña de paja al estilo dominicano en un ambiente relajado y amigable. Este restaurante sigue siendo una referencia segura en la ciudad.

Situado en el centro del Paseo de la Costanera, Le Bistro se ha consolidado como el lugar de encuentro semanal de los expatriados y la cantina de muchos turistas. Christian y Cécile, originarios de Francia, ofrecen sus platos bistronómicos a precios razonables. El menú cambia cada día en función de lo que haya y de las verduras de temporada, y se acompaña de una buena selección de vinos. Un menú innovador y refrescante. ¡Se puede ir con los ojos cerrados!

¡Un verdadero descubrimiento! Bruno nació en Bruselas y ha desempeñado muchas funciones dentro del sector turístico (barman en bares modernos de París, animador en el Club Med…). Le da la bienvenida con una sonrisa, con alegría y buen humor. Enseguida se sentirá como en casa en este restaurante moderno que también sirve los mejores cócteles de Las Terrenas. Su especialidad: la carne con certificado Black Angus cocinada en fuego de leña. La carta está muy bien diseñada y todo es excelente: ensalada de buey tailandés, ceviche de dorada, cazuela marinera con mantequilla blanca… Cabe destacar la mousse de chocolate del chef. Música internacional variada. En resumen, se trata de un lugar excelente para una cena romántica o con amigos.

El menú está lleno de especialidades italianas como en todo Dominicus. Pizzas, platos de pasta…  buenas y en porciones abundantes. También puede dejarse tentar por la gran terraza que se extiende bajo su cabaña.

Ubicado junto a la piscina del Punta Rucia Lodge, este restaurante goza de un entorno idílico con vistas a las aguas turquesas del mar Caribe. En el menú encontrará especialidades de pescado, por supuesto, pero también platos de carne y algunos platos europeos según el estado de ánimo del chef. Los productos son frescos y
de calidad. Es posible reservar (con antelación) una mesa en la playa.

Dirigido por dos hermanas, el establecimiento ofrece cocina típica dominicana. Los clientes se sientan en grandes mesas frente a la barra en un ambiente familiar. Encontrará empanadas de cangrejo, gambas o pollo.

Este restaurante situado en la playa tiene un ambiente bastante típico e intimista. Propone una comida italiana de calidad después de una copa de prosecco servida como aperitivo. Podrá disfrutar de un cóctel de gambas flambeadas con coñac o de raviolis de marisco. A partir de las 18.30 h, una parte del restaurante se transforma en beach club y acoge numerosos eventos durante la temporada.

Tex-mex, pizzas, especialidades dominicanas e internacionales componen el menú de este adorable chiringuito, un poco apartado de la zona de paso y con un servicio amable. Gran terraza y bebidas frías. De lunes a sábado, propone un bufé dominicano para la comida. Excelente relación calidad-precio.

Gérard Prystasz, ex chef del Palacio del Elíseo, ofrece cocina francesa adaptada a los productos locales. El resultado es una cocina exquisita, variada y rica en sabores, como demuestran las propuestas de muslo de pollo relleno con langosta, las rodajas de dorada con fruta de la pasión y los numerosos postres, entre ellos un sabayón (especie de natillas) de fruta fresca. Todo ello regado por un buen vino y servido en el interior o en la terraza en un pequeño jardín con sombra.

Cristine la da la bienvenida a La Ola con una gran sonrisa y buen humor. Su pequeña cabaña de paja y madera de tipo mediterráneo se encuentra frente al mar y disfruta de una deliciosa brisa. Los productos del mar son los protagonistas (todo fresco), así como algunas especialidades francesas. El menú está escrito en una pizarra, cambia regularmente y depende de las capturas del día. Todo ello con una relación calidad-precio imbatible. Por último, los amantes de la petanca estarán encantados ya que pone una pista a disposición de los clientes.