Château de 1726, acoge cada año a visitantes y profesionales del mundo del vino, así como a consultores certificados
Hecho por la naturaleza en Francia. Cada año, visitantes y profesionales de más de 90 países de todo el mundo acuden a visitar el Château de Pommard. Allí, exploran el mundo del vino con asesores certificados por la Wine and Spirit Education Trust (WSET) y degustan las mejores expresiones de Chardonnay y Pinot Noir, a su paso por los pueblos que componen la Route des Grands Crus. De la vid a la copa, los curiosos descubren el Clos Marey-Monge, una curiosidad geológica rica en arcilla y piedra caliza, que reúne siete parcelas distintas dentro de uno de los Climats de Bourgogne reconocidos como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Fundado en 1726, el Château de Pommard combina 300 años de experiencia con la visión innovadora de la familia Carabello-Baum. Hoy, críticos y enófilos aclaman la conversión de Clos Marey-Monge a la viticultura biodinámica. Más enérgicas, más abiertas y vibrantes, las cuvées resultantes revelan la expresión más pura de su terruño respetando el medio ambiente. Una gama de degustaciones de 20 a 41 euros según la fórmula: degustación Clos Marey-Monge, Descubrimiento de Borgoña o Degustación a medida, experiencias que se pueden reservar y disfrutar en francés y en inglés. La Experiencia Joven, de 5 euros, es una forma divertida para que los niños de 5 a 12 años sigan el viaje de un racimo de uvas y prueben 4 siropes de frutas producidos por Ferme Fruirouge. Los adultos, por su parte, comprenderán mejor el efecto de la vendimia en el emblemático coupage Clos Marey-Monge Monopole.
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