LA GUINGUETTE
Restaurante que ofrece un licor de frambuesa y una piruleta al final de la comida en Dijon.
Al fondo de un pequeño patio de la calle Berbisey, se esconde un restaurante de veinte plazas con aspecto de bistró de pueblo. Para encontrarlo, sigue las guirnelas. En el interior, la decoración, cargada de vinylos retros, la música que pasa en bucle y el codo de codo garantizan un momento distendido. Ambiente de grupo, platos a la perfección: un lugar ideal para reunirse con una banda de amigos. No es de alta gastronomía, pero los platos simples se sirven en gran cantidad. Gratiores, tortillas, queso y otras ensaladas gigantes son tan imponentes que el chef te propone un Tupperware si no puedes terminar tu plato. No te pierdas la tortilla en las casadas y el gratin de Morteau al realzamiento. Al final de las comidas, es licor de frambuesa y chupa a modo de regalo de despedida… de adiós más exacto, ya que se desea volver a dar un paseo en esta agradable toallita.