CALANQUE DE MORGIOU
Cala Morgiou con buenas instalaciones, profunda y cerrada en algunos lugares, ideal para practicar deportes náuticos.
Situada entre las calas de Sormiou y Sugiton, esta cala es una de las únicas a las que se puede acceder directamente en coche (sólo fuera de temporada, excepto para los residentes locales) y cuenta con infraestructuras apreciables: un bar-restaurante, un pequeño puerto de pescadores (todavía en actividad) y auténticas cabañas marsellesas. Está habitada todo el año. Morgiou, al igual que su vecina Sormiou, es una de las calas más famosas del parque nacional, una de las más fotografiadas y, por tanto, muy popular entre los senderistas y los bañistas. Es profundo y cerrado en algunos lugares, lo que significa que también es bastante sombreado. Como consecuencia directa, al igual que en los otros arroyos, el agua es fresca, incluso en verano. Si quiere caminar o hacer senderismo, hay un camino a la derecha que lleva al Cap de Morgiou. A la izquierda, está la pequeña playa y el camino que lleva al calanque de Sugiton. Como anécdota, las escaleras del puerto fueron bautizadas como "la escalera de Luis XIII" cuando el rey hizo su aparición aquí en 1622 para asistir a una pesca con la "madrague" (método tradicional importado por los focenses de Marsella en la Antigüedad) para capturar el atún. La historia de Morgiou y de su pequeño puerto está estrechamente ligada a la práctica de la pesca. Tenga en cuenta que en los días de viento, Morgiou está especialmente expuesto. Por ello, es preferible elegir los días en que no sopla el viento Mistral para descubrir esta maravilla natural.
Pour se rendre à la calanque de Morgiou, prendre le métro ligne 2 jusque la station « Rond Point du Prado », puis prendre le bus n° 22 jusqu’au terminus « Les Beaumettes ». L’entrée du parc se tient juste à votre droite à la sortie du bus. Prévoyez une paire de baskets et une bouteille d’eau car pour arriver au niveau de l’eau, 4 kilomètres de dénivelé vous attend ! Et comme toute peine mérite salaire, vous serez récompensé de vos efforts après une bonne heure de marche, en contemplant un paysage paradisiaque et pourquoi pas en sirotant une « Cigale », une bière locale commercialisée dans le restaurant qui se trouve en contrebas.