Acogedor restaurante que ofrece una cálida bienvenida y cocina italiana casera en el barrio de Saint-Julien.
En el barrio de Saint-Julien, la auténtica Sicilia hay que ganársela. Es una dirección que no está necesariamente en el candelero, pero que puede descubrir auténticamente quien lo desee. Liliane y su familia le reciben calurosamente, como si estuviera en su casa, para un momento de gastronomía italiana en recetas familiares, heredadas de la abuela siciliana que llegó a Francia en los años 60. Pasta con albóndigas, arancini con trufas, calamares rellenos de carne y, por último, un divino cannoli con pistacho, la cocina es tan acogedora como el propio local. Una auténtica delicia
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre LA SICILE AUTHENTIQUE
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
 
         
                     
                     
                     
                     
                     
                     
                     
                     
                     
                     
                     
                     
         
                                     
                                     
                                     
                                     
                                     
                                     
                                     
                         
                                           
                                           
                                           
                                           
                                                                                     
                                                                                     
                                                                                     
                                                                                     
                                                                                    
Ça respire l'authenticité.
On a l'impression d'aller manger dans la famille, c'est parce que la cuisine est familiale et les produits sont bons.
La simplicité et la gentillesse Ça ne s'improvise pas.
Très bonne adresse