Hay que cruzar el pequeño puente sobre la Cagne para llegar a Coursegoules. Un pueblo armonioso enclavado en su promontorio a 1.000 m de altitud, con sus fachadas orientadas al sur (está a 20 km en línea recta del mar) y el Cheiron a sus espaldas. Mitad mediterráneo, mitad montaña, es un pueblo con carácter, con una bella unidad arquitectónica. aquí viven 520 personas. La mayoría de las casas están construidas con piedra local y rematadas con tejas redondas. Paseando por sus sinuosas callejuelas encontrará pasadizos cubiertos, una fuente, un lavadero y un molino construido por los templarios. Todo ello dentro de las antiguas murallas, algunas de las cuales siguen en pie. La mitad del municipio está catalogada: la iglesia románica, la aldea de Saint-Barnabé, al sur del pueblo, y la capilla de Saint-Michel, camino del puerto de Coursegoules. Desde aquí se pueden ver las terrazas donde se cultivaba trigo y rosas para las fábricas de perfumes de Grasse. La situación geográfica del pueblo, que parece la puerta de entrada al Haut Pays cuando se llega desde Vence, ha favorecido el establecimiento de numerosos artesanos y empresas de diversos sectores. Hoy en día, Coursegoules es una de las ciudades de la región donde la actividad económica y el turismo han crecido considerablemente en los últimos años. Coursegoules es también un lugar notable incluido en la red Natura 2000, cuyo objetivo es mejorar la forma en que se tienen en cuenta las cuestiones de biodiversidad en las actividades humanas.Un poco de historia. Originalmente, el lugar estaba ocupado por un oppidum celto-ligur. Se han encontrado numerosos vestigios celtoligures, recintos de piedra, alrededor del pueblo, en los yacimientos de Autreville, Campréou, La Tour y Puy de Naouri. También hay miliarios romanos. hay 17 en la antigua calzada romana de Vence a Castellane, que pasa por Coursegoules. Entre ellos, el de Autreville, a más de 1.000 m de altitud. También se cree que el emplazamiento de la iglesia de Saint-Michel fue el de una villa galo-romana. Coursegoules se construyó sobre una cima rocosa según un plan defensivo, con murallas y tres puertas de acceso al pueblo, al norte, al sur y al este. En el siglo XIII, el pueblo era la fortaleza de los señores de Villeneuve. Como ocurrió en toda la región, el pueblo empezó a decaer en el siglo XIX y siguió despoblándose hasta la segunda mitad del siglo XX. A partir del siglo XX se produjo el fenómeno inverso. Hoy en día, la población de Coursegoules supera los 500 habitantes.
