CUEVA PREHISTÓRICA DE LAS MARAVILLAS
Cueva prehistórica descubierta en 1920, con concreciones y gours donde se reflejan estalactitas, pinturas rupestres
El acceso a estas cuevas es fácil: solo hay que bajar una quincena de escalones... y enseguida volver a subirlos. Situada a escasos cien metros del paraje de Rocamadour, este enclave fue descubierto en 1920 y catalogado como monumento histórico en 1925. La visita comienza con la observación de unos bellos sedimentos y de socavaciones donde se reflejan las estalactitas gracias a una iluminación que resalta el conjunto. La erosión continua de las aguas del Causse es la que ha tapizado la cueva con estos sedimentos. Se siente cierta emoción ante el trabajo de los artistas del Paleolítico superior que hace más de 20.000 años convirtieron este lugar en un santuario magníficamente adornado con pinturas rupestres: caballos, ciervos, felinos y huellas de seis manos en negativo.