LE CANTOU

En la variante de Rocamadour del Camino de Santiago, situado al pie del santuario, este centro de acogida cristiana pertenece a la congregación de las Hermanas de Nuestra Señora del Calvario de Gramat-Rocamadour. Las Hermanas de Nuestra Señora del Calvario tienen sus raíces en la Casa Madre de Gramat, cuna de la Congregación, con el Beato Padre Bonhomme y las fundadoras, Hortense Pradel (Madre Teresa) y su hermana Adèle. La congregación se fundó el 15 de octubre de 1833 para atender a los enfermos a domicilio y para las obras parroquiales. Las primeras monjas de la comunidad, originalmente llamadas Hermanas de la Presentación de la Virgen, se multiplicaron rápidamente y abrieron varias escuelas parroquiales en las zonas rurales de la diócesis de Cahors. La construcción de la casa madre se llevó a cabo en Gramat en 1883. El instituto obtuvo el decreto de alabanza el 8 de marzo de 1911 y la congregación fue finalmente aprobada por la Santa Sede el 27 de diciembre de 1927. La congregación siguió creciendo en Francia, y luego las hermanas fueron a América Latina: 1906 en Brasil y 1907 en Argentina; a África: 1959 en Costa de Marfil, 1991 en Guinea Conakry y 2007 en Burkina Faso. Se han establecido en Asia: en 1999 en Filipinas y en 2009 en Vietnam. La congregación pone la casa de Cantou a disposición para acoger a peregrinos de todas las clases sociales, culturas y lenguas con diversos proyectos, o también para acoger a hermanas de todas las congregaciones para un tiempo de desierto, descanso y renovación y a laicos que no son necesariamente peregrinos. El Cantou está situado en el corazón del santuario de Rocamadour, en un lugar tranquilo, propicio para la meditación y con una vista excepcional del lugar. Las hermanas de la comunidad participan en la vida del santuario y te invitan a compartir su tiempo de oración y encuentros.

Los servicios son los del santuario de Rocamadour. En cuanto al alojamiento, el lugar ofrece una capacidad de 14 plazas con 7 habitaciones individuales, 1 habitación doble y 1 dormitorio de 6 plazas (3 duchas, 3 WC). No hay servicio de comidas, pero hay una cocina totalmente equipada a disposición de los huéspedes, y los peregrinos pueden llevarse picnics. La acogida y el alojamiento están a cargo de tres hermanas: la hermana Jacqueline, la hermana Marie-Jeanne y la hermana Marie-France, asistidas por una hospitalera. Los peregrinos son bienvenidos a partir de las 15:00 horas. Las habitaciones o los dormitorios deben quedar libres antes de las 8.30 horas para el buen funcionamiento del establecimiento.