CASTILLO-MUSEO PREHISTÓRICO
Castillo-museo con el enterramiento colectivo más antiguo del Midi y ofrendas, relata la historia de los primeros agricultores
Todo comenzó en 1983 con el descubrimiento de una cámara sepulcral en el fondo de la cueva de Bélesta. Las excavaciones sacaron a la luz un verdadero tesoro arqueológico único en Europa: una tumba colectiva neolítica con más de treinta esqueletos y 28 objetos de cerámica en un excelente estado de conservación. Pero eso no es todo: la investigación ampliada al resto de la cueva reveló los restos de varias ocupaciones humanas en varios niveles acumulados en un grosor de ocho metros. El museo del castillo, inaugurado en 1992, se centra en este período de la prehistoria reciente, conocido como Neolítico, es decir, unos 4000 años antes de nuestra era. «Este es un período crucial de la historia, una verdadera revolución, porque el hombre pasa de ser un depredador a ser un productor», comenta el conservador del museo. El castillo-museo de Bélesta forma parte de un auténtico castillo real del siglo XIII, que ha sido restaurado con cuidado y originalidad. El lugar es como una verdadera máquina para retroceder en el tiempo, y alberga, además de una escenografía de última generación que hará las delicias de grandes y pequeños, reconstrucciones a tamaño real, como la de un cuadrado delimitado para la excavación o las que representan la vida cotidiana de nuestros antepasados en el período neolítico, y como guinda del pastel, la de la sala sepulcral de la cueva. ¡Realmente espectacular! Este museo no es solo educativo y lúdico, es también una referencia científica. En efecto, la difusión de la cultura neolítica está asegurada gracias a la estrecha colaboración del museo con el depósito arqueológico departamental.