CASTILLO DE QUÉRIBUS
Un castillo importante y bien conservado con impresionantes vistas de las Corbières, que revela un pasado rico en intrigas y batallas.
Dominando las Corbières, la majestuosa ciudadela de Quéribus fue uno de los principales castillos de la frontera norte del reino de Aragón. Chabert de Barbaira, partidario del rey de Aragón, ocupó en 1239 el emplazamiento fortificado de Quéribus, donde acogió a los herejes cátaros que huían tras la caída de Montségur. Queribus fue el último bastión en caer ante los cruzados en 1255. Tras dieciseis años de reinado, Chabert de Barbaira se rindió, no sin antes negociar su libertad para volver con el rey de Aragón, dejando Quéribus en manos de los ingenieros y soldados reales. Convertida en fortaleza real, vigilaba la frontera entre los reinos de Francia y Aragón. San Luis se convirtió entonces en el amo de las Corbières. El castillo perdió su interés estratégico en 1659, bajo el reinado de Luis XIV, con el Tratado de los Pirineos que estableció una nueva frontera entre Francia y España. Ofrece una hermosa visita: un sendero conduce al castillo después de una caminata de diez minutos, con señales explicativas a lo largo del camino. La terraza del torreón se eleva hasta los 728 metros y ofrece una vista impresionante de las Corbières, los Pirineos y el Mediterráneo. Destaca el estado de conservación de los elementos vinculados a la vida cotidiana (aljibe, edificio principal, ubicación de la chimenea…). Aproveche su visita para descubrir los restos medievales del pueblo de Cucugnan. Destacan las ruinas de una cisterna o el molino de Omer (del siglo XII), totalmente restaurado.