Los mejores hoteles Uzbekistán

Esta pequeña madrasa se transformó en hotel hace diez años. Desde entonces, la gestión no ha hecho más que mejorar el confort y la calidad de los servicios, y hoy la fuerza de este establecimiento reside en su incomparable encanto. Las habitaciones están dispuestas en las antiguas celdas, alrededor de un patio fresco y agradable donde le esperará un reconfortante té después de un día de caminata por la ciudad. Las habitaciones y sus muebles son el orgullo de la tradición y de la artesanía (con magníficos suzanis en las camas y en las paredes); son casi un viaje en el tiempo, sin descuidar el confort. Sin embargo, al pasar por el baño se entra en el siglo XXI, con cabinas de ducha y equipos de última generación. Un hotel verdaderamente único, visitado por huéspedes distinguidos (delegaciones de las embajadas de Francia y Alemania residían allí durante nuestra visita). El personal es profesional y muy amable. No dude en disfrutar aquí de su cena, ya que el restaurante del hotel ofrece una cocina muy sabrosa. Pida visitar la mezquita adyacente, de trescientos años de antigüedad, cuyas paredes aún conservan algunos vestigios de la decoración original.

Las habitaciones estándar no brillan por su espacio, pero son bastante cómodas y todas disponen de un pequeño cuarto de baño funcional. El hotel está bien situado frente a la cúpula de los sombreros, cerca de Poy Kalon. Las habitaciones 23, 24 y 27 dan al minarete.

Decorada con buen gusto, esta antigua casa del barrio judío se reconvirtió con acierto en un B&B. Las habitaciones y el comedor están decorados íntegramente en estilo oriental. Las habitaciones dan a un pequeño patio donde podrá relajarse y disfrutar de la excelente cocina. A pesar de la tentación de ampliarse, el hotel ha mantenido siempre esa escala humana que lo convierte en un agradable alojamiento. Un poco más abajo, en el número 60 de la misma calle, otro establecimiento de Sasha & Son ofrece habitaciones algo más lujosas de estilo europeo.

Encantadora casa con balcones y dormitorios en la primera planta, alrededor de un pequeño patio; todo muy bien situado a un paso de Lab-i Hauz. Dispensa un trato excelente y se preocupa por ofrecerle todo lo necesario para una estancia confortable. Todos los B&B están en la misma zona, pero este es el más cercano al estanque, a pocos metros de sus competidores. Nazira puede organizar rutas por la ciudad y sus alrededores.

El hotel está bien situado, justo detrás de la mezquita de Kalon y a pocos pasos de las imponentes murallas de la fortaleza. Una vez pasado el vestíbulo, más bien anónimo, se descubren habitaciones decoradas al estilo tradicional, bastante bien equipadas y algunas (pocas) con vistas sobre las cúpulas de Poy Kalon y el minarete. El restaurante sirve cocina local de estilo familiar, y el desayuno puede servirse en el amplio patio, provisto de una piscina y un iwán donde relajarse a la sombra durante las horas más calurosas del día. Buena gestión y personal amable.

Ideal para las microcarteras, siempre que no contemplen la higiene y el confort. El servicio es inexistente, el agua caliente es caprichosa y colorida, pero en cualquier caso los cuartos de baño son más un museo de la coexistencia entre insectos y micoses que un lugar donde se lava. En el momento de nuestra visita, el hotel ya no disponía de la licencia para acoger a los turistas. Pero los individuos siempre pueden intentar negociar y obtener el precio local, lo que a menudo se hace con la ayuda de un taxista que conoce la dirección.

En Itchan Kala. Se trata de tres pequeños hoteles situados cerca de la puerta norte, uno de ellos más lujoso, terminado en 2004, con un total de 18 habitaciones. Todos son cómodos, decorados al estilo europeo y equipados con aire acondicionado. El primer hotel, con su decoración más bien tradicional, es un poco oscuro; el segundo tiene un patio donde se puede disfrutar de un poco de luz, y el tercero insiste un poco más en el estilo tradicional.

Acogedor trato y ubicación cerca de la puerta oeste de la ciudad. Las habitaciones están a la manera uzbek, muy espaciosas, sucintamente decoradas. Cuartos de baño bien cuidados, climatización.

Uzbektourism no se puso límites a la hora de renovar el antiguo hotel Khorezm. La planta en forma de U del hotel ha sido cerrada con una gigantesca fachada de cristal, una piscina ocupa el centro del edificio y todas las habitaciones fueron remodeladas al estilo europeo. El primer gran hotel de lujo de toda la región carece cruelmente de carácter. En el vestíbulo hay un cajero automático que dispensa dólares.

Un poco alejado del centro de la ciudad, pero la estación del metro está a los pies del hotel y esta línea lleva a la plaza Tamerlán en menos de diez minutos. Las habitaciones están a la altura de las tarifas indicadas, así como de la calidad del servicio y la gastronomía. En el vestíbulo hay un cajero automático que solo entrega som. El hotel cuenta con dos restaurantes: la Brasserie ofrece desayunos y barbacoas en verano, en el parque del hotel, alrededor de la piscina (de 6.30 a 22 h, alrededor de 35 $ por persona), mientras que el restaurante Allegro (abierto de 18 a 23 h, alrededor de 45 $ por persona) ofrece excelentes especialidades gastronómicas mediterráneas. El hotel es frecuentado principalmente por viajeros de negocios. También es un buen lugar para tomar un café y leer la prensa internacional (a veces censurada).

El antiguo hotel Dedeman Silk Road forma parte ahora del grupo hotelero Wyndham. Encontrará lo que hace famosa a esta cadena de hoteles de negocios: más de doscientas habitaciones de categoría internacional, cómodas y espaciosas, pero sin un carácter particular. El hotel dispone de sauna, dos piscinas (una cubierta y otra al aire libre), una cafetería y un restaurante. El bar abre las 24 horas del día, pero tampoco ofrece nada especial en cuanto a entorno o ambiente.

Hotel moderno y agradable, de arquitectura rococó. Tiene un patio a la fresca y una pequeña piscina. Las habitaciones también ofrecen un mayor confort que el hotel medio en este rango de precios. Todas ellas están equipadas con televisión y aire acondicionado. La agencia de viajes Dolores, a la que pertenece el hotel, tiene su sede aquí, por lo que dispondrá de todas las facilidades para encontrar mapas, libros y guías de Uzbekistán, así como para organizar una ruta completa por el país o por Asia Central.

Detrás de este nombre cantante (Yangi Shamol se traduce literalmente por "viento nuevo") se esconde el antiguo hotel Tara, muy conocido y frecuentado por los viajeros con micropresupuesto y que los taxistas identificarán mejor bajo este antiguo nombre.

No hay aire acondicionado, ni televisión, cuartos de baño improbables y camas desoladas hasta el punto de tocar el suelo, pero una tarifa que desafía toda competencia y una acogida siempre desenfadada. Desventaja: el establecimiento está situado muy lejos del centro de la ciudad. Para llegar a este hotel desde la estación de metro de Sabir Rakhimov, podrá tomar el tranvía número 17 y bajar hasta después de cruzar una vía férrea. Si ve una gran mezquita a la izquierda, es que ha esperado demasiado. El hotel se encuentra 200 m antes de esta mezquita, lado opuesto. Apunten a los tres grandes edificios verdes: Yangi Shamol es el del medio (no hay ningún cartel ni signo distintivo).

Inaugurado en marzo de 2020, en pleno casco antiguo, este establecimiento de tamaño modesto hace todo lo posible por jugar en la gran liga. La recepción bajo una cúpula de cristal decorada con marquetería calada marca la pauta: se ha hecho hincapié en la decoración y el ambiente oriental de las zonas comunes, incluida la terraza de la azotea, que ofrece una vista panorámica excepcional de la ciudad. Las habitaciones y los cuartos de baño son espaciosos: el mobiliario, por desgracia, no ofrece el mismo toque oriental, pero es cómodo y funcional.

Situado detrás de la madrasa Nadir Divanbeg, a dos pasos del Lab-i Hauz, este hotel ofrece habitaciones bonitas, cuidadas, cómodas y bien equipadas. Apreciará los techos de madera, los amplios cuartos de baño con bañera y el tranquilo patio central. La sala de desayunos está en el sótano, pero agradablemente decorada, y el bufé es copioso. Todo está dispuesto para situar este hotel en la categoría de lujo excepto... sus precios, que siguen siendo razonables. Es una buena oferta, sobre todo porque el personal es encantador y atento.

Aunque dice ser una pensión, en realidad es un pequeño hotel con seis habitaciones en una gran mansión a tiro de piedra de la bulliciosa calle Ivlieva. Las zonas comunes, las habitaciones y los cuartos de baño son muy espaciosos. Es grande y confortable, con decoración minimalista, y con muchas fotos de Taskent antes del terremoto y del patio interior. También cuenta con una sala de billar y una piscina en el sótano.

Este confortable hotel de tamaño medio es la tercera entrega de la historia de éxito de los hoteles Art de Taskent. Después del Art Deluxe Hotel y el Art Hostel, aquí está el Grand Art Hotel. Como los dos primeros, está muy bien situado en el centro de la ciudad, en una calle pequeña y tranquila. Es el último pero el más grande de los hermanos, con sus 29 habitaciones, incluyendo una VIP, repartidas en tres niveles. El patio interior, con su pequeña piscina, es perfecto en los días soleados para descansar al fresco o tomar un relajante aperitivo después de un día ocupado de visitas. En la planta baja, el hotel cuenta con un restaurante acogedor, casero y económico. Un pequeño menú bien protagonizado por la cocina clásica uzbeka y rusa. Es muy interesante, y raro, tener un buen restaurante abierto las 24 horas del día directamente en su hotel. ¡Una verdadera ventaja! Un hotel sencillo y asequible pero confortable, muy bien situado y que ofrece todo lo esencial con un verdadero sentido de la hospitalidad. ¡Esta es la receta que hace que los hoteles Art sean tan exitosos!

Inaugurado en 2015, este establecimiento situado en Itchan Kala, cerca del bazar, está muy bien dirigido por Shakir y su familia. Sus hijas hablan inglés, lo que es útil, sobre todo para las excursiones o los traslados a Urgench o a Bujará. El té y la fruta se sirven a cualquier hora del día, y hay una pequeña cocina a disposición de los huéspedes. Un establecimiento muy bueno que tiene la particularidad, todavía bastante rara en Jiva, de estar abierto todo el año.

Inaugurado en marzo de 2017, este hotel decorado con telas locales es, hasta la fecha, uno de los pocos establecimientos para pernoctar en la ciudad, y sin duda la mejor dirección. Una buena opción si quiere pasar la noche en Marg'ilon. Además de las habitaciones, que no tienen ningún carácter especial, pero son nuevas, hay un restaurante, un pequeño bar y, sobre todo, un trozo de jardín donde es agradable relajarse al final del día cuando refresca. Sirve un desayuno tipo bufé todas las mañanas.

Inaugurado en mayo de 2017, este establecimiento, muy limpio y espacioso, está bien situado, al norte de la intersección principal de la ciudad. Disfrutará de una piscina, una mesa de billar e incluso de una sala de fitness. Ofrece muy buena relación calidad-precio, teniendo en cuenta las instalaciones. La ventaja del establecimiento es que es nuevo y en temporada la dirección utiliza personal que habla inglés. El inconveniente es su ubicación, cerca de una avenida muy transitada, pero no se puede decir que las noches en Ferganá sean muy ruidosas, así que debería poder dormir.

El hotel no está situado en el centro de la ciudad, sino en la calle Khakikat, en la tienda de Davron Toshev. En el corazón de las plantaciones de moras y albaricoques que se utilizan para producir el papel sobre el que crea sus miniaturas, Davron ha instalado un hotel sublime donde también se puede entrar en su taller y observar el proceso de fabricación del papel y asistir a una clase magistral sobre miniaturas. Toda una experiencia extraordinaria en un entorno de lujo donde Davron no ha dejado nada al azar.

Ubicado no muy lejos del parque central y de los principales monumentos de la ciudad, el Platan es un minihotel de excelente categoría que abrió sus puertas en 2014. Sus doce habitaciones son muy espaciosas, están equipadas con ropa de cama muy confortable y cama king-size, así como con un equipamiento práctico y contemporáneo de la más alta calidad internacional (secador de pelo, TV vía satélite, caja fuerte —tan raras en Uzbekistán—, batas de baño, té y café disponibles, etc.). Las habitaciones, decoradas con gusto, lo convierten en un hotel con encanto. Su bonito patio interior está rodeado de vegetación y dispone de una zona de descanso. Una ventaja significativa del Platan: alberga el restaurante del mismo nombre, conocido como la mejor mesa de la ciudad por su refinada cocina. ¡Así que podrá ir a desayunar con total confianza! Entre los valiosos servicios adicionales, el traslado de ida y vuelta al aeropuerto es gratuito y la conexión wifi es de buena calidad (lo que no es un requisito previo). Debido a su reducido número de habitaciones, el servicio es casi personal. Un establecimiento perfecto para una estancia relajante y muy confortable.

Muy bien situado en el corazón del casco histórico, justo al lado de las cúpulas comerciales, Ziyo Baxsh ofrece diez espaciosas, sencillas, pero confortables y cálidas habitaciones con unos magníficos techos de madera. Situadas en dos plantas de una venerable residencia de comerciantes renovada, dan a un bonito, fresco y tranquilo patio con árboles. El salón de recepción y desayuno está delicadamente decorado con motivos geométricos y de estuco pintado. El gerente, Azizbek, es un apasionado de su trabajo y es muy atento con sus clientes. Aquí disfrutará de un establecimiento muy agradable y de toda la atención necesaria para una estancia confortable: calefacción en las habitaciones, camas grandes, TV vía satélite, secador de pelo, etc.

Este tradicional B&B, que fue sometido a una importante renovación en 2017, está situado en el corazón histórico de Samarcanda, en el emplazamiento de un antiguo caravasar y en las inmediaciones de los principales monumentos: el mausoleo Gur-e Amir, Ak Saray, Rukhobod, la plaza del Registán, la mezquita Bibi Khanum y el famoso bazar de Siyob. La terraza ofrece una vista excelente de Gur-e Amir (de ahí su nombre) y del Registán. Siendo una de las primeras casas de huéspedes de la ciudad, el B&B Emir se ubica en una bonita residencia que perteneció a los antepasados del actual propietario, el señor Olim Rafiev (antiguo propietario del B&B Antica), quien ha centrado aquí toda su atención. Ardiente defensor de las técnicas tradicionales, estas tienen una presencia destacada en su hotel, donde predominan los materiales y las técnicas tradicionales de construcción y ornamentación uzbekas: madera, cerámica, lana y ganch (los famosos grabados cincelados sobre el propio material constructivo —generalmente madera— y que se encuentran en los techos y puertas de las hermosas casas tradicionales). Las paredes de la casa están cubiertas con ladrillo de adobe natural, tradicionalmente utilizado en climas cálidos. Contribuyen a un muy buen aislamiento a la vez que filtran el aire y mantienen un microclima saludable en el interior. El hotel ofrece habitaciones (desde individuales hasta cuádruples) que pueden ajustarse a las necesidades de los viajeros individuales y de los grupos pequeños. Tiene una buena relación calidad-precio.

Este recuerdo de la época soviética ha sido renovado adecuadamente y todas las habitaciones disponen ahora, además de una nueva capa de pintura y nuevas alfombras, de televisión y aire acondicionado. Sin embargo,  aún son bastante pequeñas y los baños no son particularmente lujosos. Por el mismo precio, puede alojarse en el Hotel Fayz, más alejado del centro de la ciudad, en la carretera hacia el aeropuerto, pero mucho más cómodo.

Inaugurado en abril de 2019, este hotel-boutique está idealmente situado entre el circo y el bazar Chorsu, fácilmente identificable por los paneles esculpidos que representan las principales ciudades a lo largo de la Ruta de la Seda. En el interior, nada se ha dejado al azar para el bienestar de los visitantes: grandes habitaciones, ropa de cama de calidad, baños espaciosos y un pequeño jardín mantenido con cuidado. Las dos cómodas yurtas le permiten dormir con amigos o familiares en un alojamiento inusual. El propietario también posee dos grandes apartamentos en los edificios adyacentes.

Este alojamiento, justo en el exterior de la puerta oeste), cuenta con todas las características de un albergue juvenil, algo poco frecuente en Uzbekistán, con dormitorios y una terraza sombreada donde se pueden reunir los viajeros. Una buena opción para aquellos que viajan con presupuestos modestos.

Abierto desde abril de 2017, y situado en el corazón de Itchan Kala, este pequeño establecimiento de nueve habitaciones está muy bien decorado con alfombras y pinturas de la región. La mayoría de los objetos expuestos se pueden comprar a precios muy razonables.

Entre la segunda y la tercera cúpula, la fachada del Shahriston oculta un vasto hotel dispuesto en torno a un conjunto de patios que ofrecen diferentes ambientes donde sigue dominando Oriente, con entrelazados y motivos esculpidos en estuco. Las habitaciones ofrecen un excelente nivel de confort y espacio, complementado con una gran gama de servicios (baño turco, sala de fitness) y extras (spa, centro de belleza). Por la noche, los balcones se iluminan para darles un toque de calidad y un aire a Las mil y una noches. No podría estar más en el corazón del casco antiguo.

Este hotel de gestión familiar, construido al estilo de una casa tradicional con un gran patio rectangular y una gran mesa común en el centro, abrió sus puertas en 2019. Su ubicación es ideal para realizar visitas culturales sin tener que perder tiempo en desplazamientos. Hay un pequeño supermercado a solo cinco minutos a pie. Las habitaciones son acogedoras y agradablemente frescas en el calor del verano. Dispone de buena conexión wifi y el desayuno se sirve en función de la hora a la que se levante. ¡Nos encanta!

Caravan Saray forma parte del complejo hotelero familiar Minzifa. Situado en el emplazamiento de la antigua madrasa de Eshoni Pir (siglos XVII-XIX), el hotel está cargado de historia. Las habitaciones se encuentran en las antiguas celdas que ocupaban los estudiantes de la madrasa. Ahora reformado como hotel moderno con un amplio patio verde y fresco, Caravan Saray Minzifa ofrece algunos de los mejores servicios de la ciudad. La propia agencia turística del hotel, Met, organiza visitas guiadas y propuestas turísticas previa petición.

Una máquina gigantesca que emplea a 350 personas para 285 habitaciones. Este hotel, uno de los más antiguos de Taskent, construido entre 1974 y 1976 por arquitectos rusos, es uno de los símbolos de la ciudad, situado justo en el centro y dominando la plaza Amur Timur. Su sorprendente arquitectura ha acogido a todos los visitantes de Uzbekistán durante dos décadas: políticos y personajes del mundo de la cultura como Marcello Mastroiani, Pierre Richard o Sukarno, entre otros. Todo el complejo ha sido completamente renovado, con resultados desiguales dependiendo de las habitaciones pero, en general, ahora es una estancia agradable en pleno corazón de la ciudad. Ofrecen muchos servicios: gimnasio, sauna, peluquería, masajes, oficina de cambio, tiendas, centro de negocios.

Este hotel de tres estrellas se halla a dos kilómetros de Nukus, a diez minutos del aeropuerto y muy cerca de la necrópolis de Mizdakhan. Además, su altura —es el edificio más elevado de la ciudad— lo convierte en un mirador interesante sobre la ciudad. Dispone de quince amplias y confortables habitaciones con balcones sobre la ciudad o el río. Las habitaciones cuentan con un amplio baño, TV y aire acondicionado. El desayuno es una de sus mejores bazas, con muchas opciones donde elegir.

El Rahnamo está limpio, es espacioso y bastante nuevo, pero todavía es muy caro para lo que ofrece. Especialmente si no ha tomado la precaución de reservar a través de una agencia, ya que las tarifas turísticas no se negocian. Incluso en el primer caso, las tarifas no caen por debajo de los cien dólares, lo cual es demasiado caro. Pero si ha pasado una semana deambulando por Karakalpakstán o se ha dedicado a visitar Moynaq y las orillas del mar de Aral, sin duda estará encantado de encontrar ropa de cama de verdad y agua caliente sin interrupciones. ¡Hay cosas que no tienen precio!

El Grand Tashkent Hotel es un hotel situado en la ciudad de Bukhara. Este hotel ofrece un ambiente familiar y muchas instalaciones para que su estancia sea agradable. Las habitaciones están equipadas con nevera y aire acondicionado, y podrá conectarse a Internet mediante el wifi gratuito disponible. El hotel también ofrece un servicio de conserjería y servicio de habitaciones. Los huéspedes también pueden hacer uso del salón del hotel. El Grand Tashkent Hotel goza de una buena ubicación cerca de lugares de interés turístico como la plaza Amir Temur y la plaza de la Independencia. Aproveche al máximo su estancia en Bujará.