Productos gastronómicos Cerveza y cervecería Pirineos Orientales

Las cervecerías artesanales brotan como setas... y estas nuevas espumas a veces se parecen un poco. Pero la Petit Futé le ha encontrado un producto único, nunca visto en la región. Nos encanta LFT, esta cerveza tiene su propio sabor característico, y es realmente impresionante. 100% local y elaborada con cebada de la región de Cerdagne, esta cerveza nos recuerda el espíritu de los viticultores naturales. Sébastien, el fundador, es un entusiasta y un narrador nato, y no hay quien le pare... Bebemos sus cervezas ámbar, IPA o ahumadas, nuestras favoritas. Le garantizamos que se enamorará

V&B (pronunciado «vi and bi») es una mezcla inteligente entre un pub irlandés y una bodega con la idea de «dos cervezas a la vez», ¡una fórmula muy popular! El lema de la casa es: «aquí, la cerveza democratiza el vino y el vino ennoblece la cerveza». Podrá elegir entre 350 cervezas diferentes, alemanas, belgas, canadienses, quebequenses, francesas... y catalanas, 350 vinos de productores independientes y 200 whiskies, incluidos algunos de los más sorprendentes, como los whiskies japoneses. Puede alquilar grifos de cerveza para sus fiestas.

Una reconversión exitosa para este profesor de física y química, que decidió dar un nuevo giro a su vida. Las cervezas de Laurent se elaboran con maltas y lúpulos franceses certificados como ecológicos. Elaboradas in situ, en el corazón de Perpiñán, las cervezas no se filtran, no se pasteurizan y se refermentan en botella. En cuanto al contenido de alcohol, la Boc alcanza los 5° para la cerveza blanca y los 5,5° para las demás. Lo ideal es venir a probarlas directamente en la cervecería, un lugar un tanto mágico donde las buenas palabras y las risas fluyen entre el tintineo de las copas.

Desde 1998, la cervecería Cap d'Ona produce una amplia gama de cervezas rubias y ámbar tradicionales, tanto de pura malta como blancas, así como cervezas con un marcado sabor sureño de la región catalana. Acaba de ser nombrada mejor cervecería de Francia y es la más premiada. También ha sido elegida mejor cerveza belga del mundo en 2021. Y recientemente, el Cap Si Gran fue votado como la mejor bebida espirituosa del mundo. La visita a la fábrica de cerveza permite comprender las diferentes fases de producción, desde el molino de malta hasta el embotellado.

Microcervecería de la región de Haut Vallespir creada por Pierre Godron, cervecero de profesión en su Bélgica natal y creador de la famosa Chouffe. En 2021, se asoció con un compatriota que vivía en Vallespir desde hacía muchos años y compró el antiguo Hôtel des Voyageurs en Prats de Mollo. Allí creó una cerveza rubia, un inteligente brebaje de lúpulo y cebada con aromas de pan y albaricoque: "La Senyor Voltor". Debe su nombre a un buitre que, según la leyenda, sólo podían ver los osos de Vallespir. Una cerveza belga con encantadoras notas catalanas

Antes de que surgieran pequeñas cervecerías por todas partes, en la región había dos cervezas locales: Cap d'Ona y la Alzina. Esta última se elabora en una cervecería tradicional de Bouleternère, en la frontera entre los Aspres y el Conflent. Desde 2009, la Alzina intenta revivir esa tradición ancestral en la que las plantas aromáticas, las frutas, las especias y el lúpulo cuidadosamente seleccionado permitían la elaboración de bebidas fuera de lo común. Las cervezas se presentan en cuatro colores: rubia, blanca, ámbar y negra. ¡Nos encantan las cervezas únicas!

Mantet, un pueblo de altura rodeado de montañas que nos encanta porque es tranquilo (de hecho muy tranquilo), acaba de abrir una cervecería artesanal. Senglar es una cerveza bastante lupulada nacida en 2016, que se presenta en tres colores: rubia, negra o ámbar. Se trata de una cerveza diferente, un tanto atípica y deliciosa, ya que se elabora con agua del manantial de Mantet y hierbas locales. Una pequeña cervecería en la planta baja de la casa familiar para un pequeño pueblo, pero con una gran devoción y amor por el trabajo bien hecho. Para tomar fresquita después de una buena caminata.