8 À HUIT
Es uno de sus pequeños establecimientos de cercanías de los que no se puede prescindir. Práctica y bien adquirida, en esta tienda de comestibles encontramos de todo, de leche a frutas y verduras, de productos de higiene a las conservas, pasando por los placeres azucarados. También dispone de un rayo carnicero (con un auténtico carnicero que te propondrá buey de raza limusina, muy tierno, o incluso cordero pre-salado), un rayo charcutería y un servicio de reserva. Sus pollos asados, especialmente excelentes, son puras tentaciones cuando los dulces efluentes que se desprenden de la asastilla, rompen las nasas. La tienda también ofrece un servicio de entrega a domicilio, un depósito de pan, bebidas frescas y bufé frío y muchos otros. Una buena dirección.