CHEZ ROMAIN - GUEST HOUSE
Cómo llegar y contactar
Un ambiente cálido y acogedor en esta casa familiar reconvertida en casa de huéspedes, a dos pasos de la famosa roca Solutré.
Desde hace cinco generaciones, la familia Lapierre cultiva sus viñas al pie de la Roche de Solutré. Romain, el actual propietario, también ha creado una casa de huéspedes de generosas proporciones en un antiguo edificio. La veranda, la zona de relajación con mesa de billar, futbolín, proyector de vídeo y degustación de vinos locales hacen de este lugar un pequeño paraíso. Paseos en bicicleta eléctrica, descubrimiento de los alrededores en coches de época y masajes también pueden completar su estancia.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Los puntos fuertes de este establecimiento:
Para más información
Información y horarios en CHEZ ROMAIN - GUEST HOUSE
Cerrado 2 semanas en enero. Entrada de 17.00 a 19.00 y salida de 10.00 a 12.00. 5 habitaciones. Habitación doble de 109 a 129 euros; estudio / apartamento desde 149 euros. Desayuno: 12 euros (de 8h a 10h). Aparcamiento (aparcamiento privado y recarga de coches eléctricos). Todas las habitaciones pueden alquilarse con el paquete Gites a 1.400 euros por un fin de semana para un máximo de 14 personas. Servicio de catering disponible. Se aceptan animales (se aceptan animales gratuitamente. Los perros grandes no pueden dormir en las habitaciones, pero se proporciona un refugio exterior para ello). Degustación de vinos en la finca familiar a partir de 8 personas. Alquiler de coches clásicos desde 150 euros al día.
Opiniones de los miembros sobre CHEZ ROMAIN - GUEST HOUSE
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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Je recommande les yeux fermés si vous souhaitez passer un bon moment dans la région.
Nous avons passé un excellent séjour chez Romain.
L’accueil est très sympa et chaleureux, Romain a rénové l’endroit avec beaucoup de goût. Les chambres sont jolies, paisibles et confortables, elles offrent un réveil avec la magnifique vue sur les vignes.
C’est Marie qui accueille pour un délicieux petit déjeuner avec que de bons produits locaux et fait maison (orangeade et kéfir mémorables fait par Marie ! )
Pour découvrir cette belle région rien de mieux qu’une balade en vélos électriques proposés chez Romain, qui vous donnera en plus, les «meilleures adresses du coin.
Les petits déjeuners sont top et réalisés par Marie
Merci pour ce moment partagé entre amis
Je recommande absolument