EMMANUEL LE PRIVÉ
La vida está hecha de encuentros, hay una que no pasa por alto. En un momento en el que prevalece la imagen, es tranquilizador cruzar el ojo de Emmanuel. Desde lo alto de su juventud, el artista muestra una madurez fuera del conjunto. Un paso en su universo y desde el principio tendrás la diferencia. Este amante de la naturaleza tuvo el clic una noche de tormenta y quiso "captar la luz". ¡Bien lo ha tomado! Al igual que su referencia (Dave Hill), Emmanuel es un mago y convierte la vida diaria en obra maestra. Entre sus pilares, la naturaleza: " libertad de descubrimiento y sensación de sentirse pequeñito en un mundo inmenso ", nunca se cansa de descubrir la buena luz o el cielo amenazando a desear… Otra pasión por los viajes. Desde Estonia hasta Cuba pasando por Deauville (sí), tantas imágenes propicias para la evasión y el reparto de sus emociones. Un recorrido iniciático enajenado de encuentros y de compartidores. Por último, una de las prerrogativas de este cazador de imágenes: la puesta en escena. Con una formación de diseño, la imagen es su credo. La búsqueda de una imagen perfecta y de un ambiente único es constante, con retoques de técnicas astutas. Colores cálidos, imágenes que transportan… un descubrimiento que no deja indiferente, lejos de allí.