Los mejores alojamientos Avanos

Desde la plaza, diríjase hacia el puente y continúe por el callejón de la derecha hasta llegar a esta bonita casa griega de piedra. Mükremin es un apasionado de la historia de su pueblo y acoge con generosidad a sus huéspedes en diez cómodas habitaciones decoradas con kilims. Dispone de bonitos balcones, pequeñas escaleras, piezas trogloditas y una terraza-salón. Desde que descubrió que su casa estaba construida sobre una ciudad subterránea, ha estado excavando para sacarla a la luz. Ha convertido una parte en un estudio de arte donde los huéspedes pueden practicar alfarería y talla de madera.

Se trata de una antigua casa familiar hecha de piedra y muy acogedora que se ha transformado en un majestuoso hotel multifacético. Las habitaciones han sido renovadas y decoradas con esmero, con alfombras hechas a mano y madera en bruto de estilo otomano, además de ofrecer una magnífica vista de los pueblos de los alrededores. Puede desayunar y cenar en el hermoso patio de piedra. El restaurante ofrece los famosos mezes. Los gerentes, Ertan y Ali, estarán a su disposición para guiarle a la hora de elegir excursiones.

Esta pequeña y encantadora pensión se sitúa en lo alto de una colina, a solo 200 metros de la orilla del río Kizilirmak. Está regentada por una pareja joven y amable que ofrece habitaciones sencillas, pero cómodas. Cada habitación lleva el nombre de un color de gato, de ahí el nombre del establecimiento: Bir kedi, «gato» en turco. El desayuno tipo bufé se sirve en la terraza, que ofrece una bonita vista del valle y las montañas de los alrededores. Se alquilan escúters y ofrecen un servicio de transporte al aeropuerto.

Se encuentra en el callejón que sube justo al otro lado del puente. Se trata de un conjunto de casas restauradas con 33 habitaciones elegantes de estilo rústico  decoradas con gusto, algunas de ellas troglodíticas. Los numerosos rincones, las antigüedades y las obras de arte antiguas le dan a este lugar un encanto especial. Las vistas desde la terraza son espectaculares. Dispone de un jardín. Su propietario, Hodja (su apodo), recibe a los huéspedes en inglés. Este antiguo profesor también es artista y pinta preciosos cuadros de los paisajes y casas de la región. Por la noche, dispone de un bufé para la cena. Un lugar encantador.