LA CHALOUPE D'OR
El edificio que alberga la Chaloupe d'Or perteneció en su día a la Corporación de Sastres. Bajo la mirada de Santa Bárbara, el obispo San Bonifacio "bendice" a los clientes desde 1698. Una vez hecho esto, le toca a una sirena darle la bienvenida y "cantarle" la idea de acomodarse alrededor de una magnífica chimenea. Con su excepcional ubicación, su terraza con vistas a la Grand-Place, su carta de cervezas belgas y su restaurante típico, esta dirección es una visita obligada para quienes quieran sumergirse en la Bruselas de antaño.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre LA CHALOUPE D'OR
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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Le rapport qualité-prix est imbattable : des recettes traditionnelles revisitées avec justesse, une présentation soignée et des saveurs qui régalent à chaque bouchée.
Le cadre est tout aussi enchanteur : une ambiance chaleureuse, un service souriant et attentionné, et bien sûr, la vue imprenable sur la Grand-Place qui ajoute une touche magique à l’expérience.
Que vous soyez de passage ou un habitué de Bruxelles, ce restaurant est une adresse incontournable pour un repas de qualité à prix raisonnable. Je recommande sans hésiter !