BOULANGERIE JACQUEMOND
Partidos en busca de los mejores establecimientos de la ciudad, hemos tenido como un pequeño hueco a la hora de probar. Por suerte, cruzamos la panadería Jacquemond en una arteria de la ciudad. Atraído por el apetito apetitoso, nuestra mirada se ha colocado en el interior de las montañas de panes con chocolates, bollería y otros animadores igualmente tentadores. La historia no dirá qué ha sido de nuestros favores, ya que el dilema ha sido grande. La Tentación gourmanda, dulce o salada, ha hecho su pequeño efecto. Hasta tal punto que nos hemos dejado tentar por la tartine Saint-Jean para acompañar un aperitivo cennatorio. Con nueces y roquefort o jamón y emmental, entre otros, esta mini varita, llena de sabor, se invitaría fácilmente a un almuerzo. No importa que sea una franquicia, el artesano de panadero hace dormir en sus hornos lo mejor del pan y de la pastelería. ¿Otra duda? Coloquen su vientre y su espíritu en el reto de permanecer delante del escaparate en el que se expongan las frutas, empedradas a las frutas o a los voluminosos clafoutis. Un servicio impecable te guiará en tus opciones gastronómicas.