Un auténtico remanso de paz que ofrece una cocina gastronómica con una excelente relación calidad-precio.
Ineludible sobre Marsella, este Jardín de la Clue situado al pie de las colinas de la treba tiene todo para gustar. Verdadero remanso de paz, podrás degustar una cocina gastronómica a la excelente relación calidad-precio. Los productos proceden del jardín de esta familia de maralas desde hace varias generaciones. Las pequeñas prestaciones Maxime y Marine, los chefs, y Charlotte el sueño. Para cada uno un recorrido sin faltas. A la carta, foie gras de pato confitado; pulgada de pulpa de avellana. Entre los platos se incluye un delicioso atún mi-cuit apagado con sésamo negro, pimientos de pimientos dulces, parmesanos de berenjenas. Su filete de ternera con salsa de patatas con su atropello de patatas merece la pena. Los postres no son como esta sopa de nectarinas de verbena. Todo ello va acompañado de una excelente carta de vinos seleccionados.
Deux menus: crémeux de champignons et st Marcellin aux amandes (une tuerie), soupe de poisson, gnocchis, rouget, tiramisù et tarte tatin. Mon dieu quel régal ! Quel beau travail des assiettes !
Le songe d'or pour accompagner le tout était sublime.
Bref nous reviendrons!
Prix à la hauteur de la qualité des mets. Service impeccable.
Service et cuisine au top
Je recommande fortement ce restaurant