Cocina americana con especialidad en panecillos que ofrece productos de calidad en un restaurante con terraza.
¡Es el paraíso de los bagels! ¡Tan buenos como en Nueva York! De hecho, vienen de Nueva York… Este cartel tiene un éxito bien merecido, ya que los productos son de una calidad irreprochable, los conocimientos técnicos profesionales, la higiene perfecta. Para aquellos que no conocen esta delicia a la americana, el bagel es un pan en forma de pequeña corona que se puede degustar como un sándwich lleno de varios forros. Para los conocedores, hay el inevitable cream cheese (queso fundido por vaca que rit), pero también bacón irlandés, jamón, cebollas rojas, azulejos, salmón ahumado, pollo, por supuesto, y toda una variedad de quesos. El propio bagal es a elegir: blanco, completo, con semillas de sésamo o de adormidera, uvas, multicereales, arándanos, etc. A la carta se añade el bagal del mes adaptado a la temporada: cubierta de foie gras y magret en Navidad, cabra y cohetes en verano. También puedes elegir entre una de las 2 ensaladas veanas del día o una sopa en invierno. A mediodía hay la cola en la pequeña tienda. Todo el tiempo para reflexionar sobre los ingredientes de su bagaje. Se come o se come en el lugar - en las mesas altas en el interior o en la terraza de 40 mesas en la acera. También se aprecia el postre, las galletas, los krumbles, los brownies, el cartón, la ensalada de frutas o el tiramisú. Todo es casero y con productos frescos.
Opiniones de los miembros sobre BAGEL STORY
De succulents bagels, tout le monde a aimé, une mention spécial pour le christmas bagel! La garniture est fraîche et bien préparée.
Des prix plus que raisonnables pour Aix, un service super sympa et rapide.
Les pains bagels ne sont pas toastés et c'est parfait comme ça ils n'en n'ont pas besoin ???? (cf les autres commentaires).
Bonne continuation, on repassera c'est sur !!
Cependant, soyons honnêtes, le service semble jouer à cache-cache avec l'efficacité, et l'organisation n'est peut-être pas leur point fort. Les délais sont un peu longs, et l'impression d'ordre n'est pas vraiment au rendez-vous. Mais bon, on peut bien leur pardonner ces petits égarements quand la cuisine est à la hauteur.
En tout cas, la prochaine fois que je me perds dans mes plans alimentaires, je sais où atterrir pour une aventure gourmande !