Cómo llegar y contactar
Enorme casa de viticultor en el corazón de Surgères con aparcamiento privado y piscina vallada, ideal para una estancia.
En esta casa de viticultor situada en el corazón de Surgères, le sorprenderá encontrar un encantador parque de estilo inglés. Dispone de cinco habitaciones, todas ellas muy confortables, tres de las cuales dan al tranquilo y cuidado jardín. En el extremo del terreno, frente a la piscina, una casa rural de dos plantas de 80 m² con aire acondicionado y terraza privada tiene capacidad para 7 personas. El propietario, que también es pastelero, estará encantado de mimarle en la mesa de huéspedes o durante los desayunos gastronómicos.
Para más información
Información y horarios en H DE SURGERES
Abierto todo el año. 5 habitaciones. Desayuno incluido. Casa rural para 7 personas desde 78 €. Sin acreditación PMR. No se aceptan animales.
Mensaje de la Dirección
El H de Surgères es un hotel situado en pleno centro de la ciudad, a dos pasos del mercado, la iglesia medieval y el castillo. También es el lugar ideal para visitar la región de Charente Maritime, a sólo 20 minutos de La Rochelle. Además, su ubicación le permitirá acceder fácilmente a lugares emblemáticos como la Corderie Royale de Rochefort, Fort Boyard, La Saintonge Romane, el zoo de La Palmyre... Encontrará diversas opciones de alojamiento: habitaciones, suites y casas rurales. Para garantizar su comodidad, estos alojamientos están equipados con todo lo necesario: cuarto de baño, hervidor de agua, televisión, doble acristalamiento, wifi... En cuanto a su casa rural "La Pléiade", cuenta con una piscina y una terraza donde podrá relajarse mientras disfruta del entorno. La casa también ofrece ofertas especiales donde podrá ganar promociones especiales. ¡Una dirección ideal para vivir una experiencia única en Surgères!
Benoit a un sens inné de l'accueil, il est aux petits soins de ses hôtes.
Autre talent, fin pâtissier, il prépare chaque matin une douceur qui vient compléter un petit déjeuner déjà copieux!
Merci Benoit.
Si vous aimez les hôtels qui ont une histoire et être accueilli par des personnes passionnées il ne faut pas hésiter.
Ma vaste chambre était des plus chaleureuses et le petit déjeuner parfait.
Surtout ne changez rien, on se sent tout simplement bien chez vous !