ANCIEN CAMP DE CONCENTRATION DE NATZWEILER-STRUTHOF
El único campo nazi que se puede visitar en Francia, con un museo y un memorial que rinden homenaje a los 52.000 deportados y dan testimonio de los horrores.
En el corazón de los Vosgos, a 800 m de altitud en Mont-Louise, se encuentran los restos del único campo de concentración en territorio francés. En la primavera de 1941, los nazis abrieron el Konzentrationslager (KL) Natzweiler (Campo de Concentración de Natzweiler) en Le Struthof, en Alsacia, anexionada por la Alemania del Tercer Reich, para explotar una veta de granito rosa identificada en 1940. Hasta septiembre de 1944, los deportados vivieron un infierno en este campo, rodeado de un magnífico paisaje. 52.000 personas de toda Europa fueron deportadas al KL-Natzweiler o a su red de campos anexos. Eran principalmente deportados políticos y miembros de la Resistencia, pero también judíos, gitanos, testigos de Jehová, homosexuales, etc. El sitio de Struthof ocupa 4,5 hectáreas de laderas y terrazas. Es testigo de la terrible realidad de los campos de concentración: los barracones, las torres de vigilancia, el crematorio, la cámara de gas utilizada para experimentos médicos... Un museo recorre la historia del campo y transmite la memoria de los deportados de Natzweiler, un tercio de los cuales desapareció allí para siempre. El Centro Europeo de Deportados de la Resistencia se alza sobre la Kartoffelkeller, un sótano de hormigón armado construido por los deportados. Arroja luz sobre el ascenso del nazismo y los miembros de la Resistencia que lucharon contra la barbarie. Una película de diez minutos introduce la visita histórica. Su exposición permanente, "S'engager, Résister, Combattre" (Comprometerse, Resistir, Combatir), ofrece a los visitantes la oportunidad de reflexionar no sólo sobre el pasado, sino también sobre la construcción de Europa tras la Segunda Guerra Mundial, su futuro y las posibles amenazas a las que se enfrenta para mantener la paz. El Monumento a los Héroes y Mártires de la Deportación fue inaugurado en 1960 por el General de Gaulle, Presidente de la República Francesa. El monumento de 40 m de altura, grabado con un esqueleto de deportado, representa una llama. Un deportado desconocido fue enterrado a los pies del monumento y en la cripta reposan urnas con las cenizas de varios deportados de otros campos de concentración. A su alrededor se encuentra la necrópolis de Struthof. Todo ello contribuye al necesario deber de memoria. Una visita rica en emociones.
Para una visita completa del lugar, prevea de 2 horas y media a 3 horas. Visite el sitio web para preparar su visita, indispensable si lleva a jóvenes. Numerosos recursos están a disposición del público, incluidos archivos y relatos personales.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Reserve las mejores actividades con Get Your Guide
Opiniones de los miembros sobre ANCIEN CAMP DE CONCENTRATION DE NATZWEILER-STRUTHOF
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.





Encuentre ofertas de vacaciones únicas con nuestros socios
