Cómo llegar y contactar
La Maison Daranatz es una institución gastronómica creada en 1890. La tienda, con estantes de exposición a la antigua usanza, cobre reluciente y lámparas de cristal, es muy acogedora e invita a descubrir una amplia gama de productos: tableta gurmé, dulces de chocolate, turrón y macarrones de Bayona. Los macarrones no son demasiado dulces y tienen un apreciable sabor a almendra. Está también presente en Biarritz desde 1930.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
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Información y horarios en MAISON DARANATZ
Abierto todo el año los lunes de 10 a 19 h y de martes a sábado de 9.15 a 19 h. Venta online.
Mensaje de la Dirección
Daranatz, la tradición chocolatera de Bayona en el País Vasco (64)
Introducida por los judíos portugueses, aparece en los archivos de Bayona ya en 1670.
La casa fundada por los hermanos Daranatz en 1890 forma parte de este patrimonio y sigue deleitando a generaciones de vascos.
Es uno de los pilares de la industria chocolatera de Bayona.
Tanto en nuestra tienda de Bayona como en la de Biarritz, inaugurada en 1930, el tiempo pasa sin alterar nada.
Las generaciones han ido y venido a nuestras tiendas para encontrar un saber hacer único.
Le invitamos a compartir la larga y rica historia del chocolate de Bayona. La casa Daranatz ofrece grandes cosechas de chocolate negro, pasta de almendra fresca exclusiva y muchos otros productos
Abra la puerta de nuestras tiendas y entre en nuestro mundo. Le toca a usted descubrir nuestras especialidades
Nuestras ofertas y servicios
Opiniones de los miembros sobre MAISON DARANATZ
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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Un vrai chocolatier comme il n'en existe plus.
Le chocolat au lait de mon enfance, le même que celui du temps où mes parents avaient la pâtisserie Mauferon à Agen, pareil pour le praliné, c'est du vrai et pas de la poudre comme dans toutes les autres chocolateries de Bayonne.
Je suis tellement heureuse d'y retrouvé les regrettés chocolats de mon papa.
Continuez ainsi, c'est un pur bonheur de pouvoir déguster vos délices.
A très vite avec le plus grand des plaisirs.
Tout est bon et raffiné, que ce soit les chocolats, les tourons et les tablettes.
Gros coup de cœur pour leur macaron qui est excellent, fondant et pas trop sucré.
En savourer en fin de repas avec un petit café corsé : un pur délice.