IGLESIA DE SAN JUAN BAUTISTA

Armoniosa y equilibrada, admirada por sus torrecillas y su alta fachada, la iglesia de Saint-Jean-Baptiste proyecta su sombra sobre la plaza del Hôtel-de-Ville. Tras un periodo de abandono, la iglesia fue objeto de importantes obras de restauración en el siglo ^XIX. En la nave se puede admirar un hermoso retablo ^{del siglo XVIII} dedicado a la Gloria de San Juan Bautista. Sesenta escalones conducen a un mirador que une las dos torres.