COLEGIATA DE SAN PEDRO DE LA ROMIEU

Este espléndido edificio, clasificado como monumento histórico y Patrimonio Mundial de la Unesco, es sin duda uno de los más bellos de Gers. Con sus torres cuadradas y octogonales, su magnificencia del siglo XIV destaca en el centro del pueblo con absoluto esplendor. La colegiata fue obra de Arnaud d'Aux, natural del pueblo e hijo de un acaudalado señor, que con los años se convirtió en un cardenal muy influyente en la corte papal de Clemente V. En 1314, como cónsul privado del rey Eduardo II de Inglaterra, emprendió la construcción de esta joya del patrimonio. En 1320 se añadió un claustro, cuyos capiteles románicos esculpidos pueden apreciarse. La entrada norte permite el acceso directo, pero a este conjunto arquitectónico meridional se entra principalmente a través de la Oficina de Turismo. Le espera un espectáculo increíble, digno de un viaje fuera del tiempo. Los arcos, las esculturas, los muros pintados y las bóvedas de la iglesia de una sola nave, la subida al campanario y sus dos torres octogonales, una de las cuales contiene un pasadizo secreto con una escalera de doble vuelta, son absolutamente magistrales. Al subir, se pueden admirar los frescos de la sacristía, que han sido restaurados y que antes sólo eran visibles detrás de una reja. El paseo parapetado y los jardines siguen llenos de misterio, rodeados por un aura histórica que estremece. La vista desde lo alto, que se extiende hasta el horizonte, es excepcional.