LA GRANGE
La Grange es un nuevo restaurante bien hecho por una joven pareja, Estelle Bardou y Ghislain Béziat. Señora, cláusula adicional y discreta a la vez, está en recepción y al servicio, el señor hace su oficio a los hornos. El establecimiento está instalado en una casa de piedra de arenisca roja a la salida de Clairvaux. La fachada se ha abierto audazmente, la sala dispone de una luz máxima a través de una cristalera orientada al sur. Las carnes se escogen sin escatimar en la calidad, preparadas de manera sencilla pero con una verdadera identidad visual y gustativa, en un arte de la cocción y un tacto para sacar el máximo de un preparado relativamente sobrio pero sabrosa. Las tartas saladas o azucaradas son un homenaje a la comida familiar y ligera. El sataje es un viaje que demuestra que la sencillez natural no quita nada a la riqueza de los sabores. Todo totalmente roborífico pero sin pesadez, en una excelente relación calidad-precio.
La carte nous a donné envie de nous écarter du menu du jour : et je ne regrette rien. Délicieux magret de canard avec compotée de mangue, et des bouts de mangue fraîche. Quant au nougat glacé maison -comme tout, ici- ce fut une révélation. Le chef est aussi un fin pâtissier.
Si on veut trouver un bémol... le mur vert pomme !
Bref, une halte surprise idéale.