LES FÊTES DE LA TRANSHUMANCE
Cómo llegar y contactar
¿Qué tal si contamos las ovejas? Visite los pueblos de Languedoc para descubrir esta tradición ancestral y su cultura.
Antiguamente, la trashumancia reunía a las ovejas de las llanuras y colinas del Languedoc, que, en cuanto empezaba a apretar el calor y escaseaba la hierba, se dirigían a las alturas de las causses y a las estribaciones de la Margeride y el Aubrac. Tras un viaje de varios días, ataviados con campanillas, redondeles y otras galas, llegaban a los pastos de verano, donde permanecían el resto del verano. Hoy en día, la trashumancia suele realizarse en camión, pero cada año algunos aficionados reviven esta tradición, dando pie a una fiesta tradicional que perpetúa la convivencia del mundo agrícola de antaño. Suele celebrarse a mediados de junio, en el macizo del Aigoual, en Espérou, y en el Monte Lozère, donde el espectacular paso de unas 3.000 ovejas se acompaña de un gran mercado agrícola y de actos centrados en las ovejas... y las abejas (¡sí, también transhuman!).
Más al norte, en Aubrac, el ganado es el centro de la fiesta. Esta fiesta de la trashumancia se celebra antes, a finales de mayo. Perpetúa la tradición ancestral de los Estive, el momento en que los pastores conducen sus rebaños a los pastos de altura, el comienzo de un periodo de soledad, durante el cual el ordeño diario de las vacas y la elaboración del queso tomme (que se convertirá en cantal) marcan el ritmo de sus vidas en los "burons".