Un salón de té credo que tiene mucho que ver con su terraza de ángulo. La mayoría de las mesas están definitivamente instaladas en la acera del bulevar histórico, el cual da a la Esplanade. Así, incluso el invierno, nos instala fuera, protegido desde el exterior por las tablas de plástico y climatizado gracias a las sombrillas de calor. En el interior hay sólo 3 mesitas en el interior del mostrador, la caja fuerte y, en un rincón, el plan de trabajo del cocinero. Éste recibirá y ejecutará: hay paso en el Goeland porque las vistas son muy buenas. En particular, las tortas de grandeza con su adorna tradicional (huevo, jamón, queso) están preparadas justo como se necesita y siempre acompaña una ensalada verde. No demasiado saladas, no demasiado cocidas, adornadas a punto y bien dobladas. Las diferencias en torno a esta fórmula completa giran alrededor de un forraje de ratatulla, champiñones o quesos. Las crepes azucaradas son menos memorables, pero la versión chocolate almendra o el Ardéchoa hace felices. Restauración, pizzas, tostadas y tintas, salón de té, cafés golosos, helados. Servicio rápido e impecable.
Opiniones de los miembros sobre LE GOELAND
(Avis d'origine)
Se accettate cani all’interno, vale per tutti! Non solo quelli di piccola taglia.
Crêpe pas bonne
La terrasse n'est même pas pleine 1h30 pour manger 3 Crêpes , impossible d'avoir une fiche repas correct et en plus de ça l'accueil laisse à désirer..
Et je ne parle même pas de la propreté !
Je ne recommande pas du tout !
Sur la terrasse la plus par des clients étaient du même avis !