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Castillo del siglo XIV que domina el Garona, con la torre del homenaje más grande de Francia, frescos que representan a San Pedro y San Miguel
El castillo de Langoiran fue construido a principios del siglo XIV por Étienne d'Escoussans, señor de Langoiran y aliado de los ingleses durante la Guerra de los Cien Años. Dominando el Garona y ofreciendo una vista despejada del río, el edificio no gozaba de una posición muy estratégica, pero controlaba el acceso al río, lo que le proporcionaba una fuente de ingresos procedentes de los derechos e impuestos sobre las mercancías en tránsito por el río. No obstante, el señorío de Langoiran era uno de los más prestigiosos y poderosos del ducado de Aquitania. A lo largo de los años, la propiedad pasó por las manos de varios Girondinos de alto rango, convirtiéndose finalmente en la residencia del Presidente del Parlamento de Burdeos en el siglo XVII. Con sus 19 metros de altura, el castillo fue asediado en 1649 durante la Fronda y finalmente abandonado. Adquirido por Robert Bibonne en 1972, desde entonces no ha cesado de restaurarlo. A pesar de las numerosas modificaciones que ha sufrido a lo largo de los siglos, conserva un recinto que recuerda su función defensiva. Lo más notable es la torre del homenaje que, según Léo Drouyn, es "la más bella del departamento de Gironda". También es la más ancha de Francia. En su interior se conservan frescos que representan a San Pedro y San Miguel. No le decepcionará. Visitas guiadas a partir de 10 personas. Fiestas medievales los días 24/25 de mayo y 26/27 de julio de 2025 (con animación nocturna el sábado por la noche).
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
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Opiniones de los miembros sobre CHATEAU MEDIEVAL DE LANGOIRAN
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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Easy to park. Friendly welcome. Only €4pp. Open from 2pm onwards. Self guided tours only with information binders in various languages available. The owner/curator was really friendly and we chatted for a while after the visit. You can take your time to explore and to enjoy the beautiful views. While the castle is fairly small and currently being restored in places it is still well worth a short visit for its ancient beauty and history.
We'd also recommend a visit and tour of the nearby Lillet Maison and Parc Chavat in Podensac if you're in the area.
- Not to be confused with the Langoiran winery just down the road.