Un pico muy sencillo pero que merece la pena por su amable acogida, su cocina sencilla, eficiente y fresca, así como una inmejorable relación calidad-precio. La decoración parece haber sido congelada en los años 60. Entre la extensa carta, un pudín blanco artesanal elaborado con leche cruda, hígado de ternera con mantequilla de mármol, un filete de solla frita con mantequilla de albahaca y, en fin, un fondant de chocolate derretido en la boca. Este es un lugar amigable, y te hace sentir cómodo!
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre L'ORANGE BLEUE
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
Je ne regrette qu'une chose: habiter à 600 kms ce qui m'empêchera d'y retourner souvent.
stéphane demaegdt