DOMAINE PHILIPPE BORNARD
Es una hermosa casa familiar situada en las alturas de Pupillín. La vista es impresionante, pero es desde el sótano que hay que bajar! El amo de la casa, Philippe Bornard, comparte felizmente su pasión por el vino, volando solo desde 2005. Solía llevar su cosecha a la granja de frutas. Explica el cultivo de la vid ecológica, la vinificación natural, en la mente de un pionero como Pierre Overnoy. Allí recuerda cómo su abuela preparaba la "ratafia", una especie de antepasado del macvin. Evoca la cepa de antes, cuenta cómo permite que un vino madure de forma natural.... largas maceraciones y maduración en barricas. El viticultor, cuyo zorro es la mascota, da nombres divertidos a sus vinos: el guardaespaldas, el Ginglet, el Chamade, el Point barre, el Point barre, el Tant mieux.... Un hombre a quien conocer, entrañable, que quizás te toque una melodía de guitarra.