El castillo y la torre de Montaigne, joya histórica y filosófica enclavada en el Périgord púrpura, es una visita obligada.
En el Périgord púrpura, el castillo y la torre de Montaigne le invitan a un fascinante viaje a través de la historia y la filosofía. Estos lugares emblemáticos, situados en el corazón de un majestuoso parque, revelan dos tesoros excepcionales. La Tour de Montaigne, un edificio auténtico, ofrece una visión del mundo del famoso pensador Michel de Montaigne. Tanto si realiza una visita guiada como si explora por su cuenta, descubrirá los entresijos de este filósofo humanista: su vida, su obra y su pensamiento intemporal. A tiro de piedra, el castillo, elegantemente reconstruido tras el incendio de 1885, es testigo de su rico pasado. Antiguamente propiedad de Pierre Magne, ministro de Napoleón III, destaca por su arquitectura y sus interiores notablemente amueblados. Sólo la planta baja, el primer piso y parte del segundo están abiertos a las visitas guiadas, ya que el resto sigue habitado. El parque que rodea estos monumentos es una joya de la naturaleza, donde un circuito señalizado permite descubrir especies raras y notables. También alberga un viñedo histórico, cuyos orígenes se remontan a la época romana. Cada visita termina con una degustación de la amplia gama de vinos de la finca. A lo largo del año, el castillo organiza numerosos eventos, como la búsqueda de huevos de Pascua, conferencias en homenaje a Montaigne y teatro de verano. Un lugar donde el patrimonio, la cultura y los placeres de los sentidos se unen para ofrecer una experiencia inolvidable.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
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Opiniones de los miembros sobre CASTILLO Y TORRE DE MONTAIGNE
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
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Fazit: Das Schloss Montaigne ist auf jeden Fall einen Besuch wert.